Narra Isabela:
Mi mente ha estado en las nubes durante mucho tiempo. Desde que Rita me recordó lo miserable que soy yo a su lado, he estado más preocupada de lo normal. Después de tomar un ducha para intentar relajarme, tomo un poco de café e incluso hago un poco de yoga pero esa preocupación sigue ahí. No sé si es el miedo a ser lastimada nuevamente o simplemente son los nervios de estar en un nuevo equipo y ahora la competencia será igual a esta casi todo el tiempo.
El entrenamiento de hoy a es a las 3 de la tarde, así que aún tengo tiempo para relajarme e ir de compras, de todas maneras llevo un largo tiempo sin comprar ropa y mi armario lo necesita.
Luego de vestirme subo al auto y enciendo mi Bluetooth para escuchar mi música preferida. La tienda a la que tengo pensando ir queda un poco largo de mi casa así que lo más probable es que me tarde en el viaje.
Realmente me estoy divirtiendo mientras hago esto aunque no sea más que conducir por las calles de Barcelona. Abro la ventana y siento la suave brisa golpear suavemente mi cara y sacudir mi cabello, sonrío mientras pasa esto ya que esta siempre ha sido una de mis sensaciones favoritas. De repente empiezo a tararear mi canción favorita y no para de sonreír, quien diría que conducir me haría tan felíz.
Freno el auto cuando el semáforo se pone en rojo y aprovecho para responder una llamada que estaba recibiendo de un número desconocido.
-¿Hola?- digo yo, lo más relajada del mundo.
-No te estoy llamando para saludar. Quiero decirte que Paulo irá a Barcelona a ver nuestro partido, así que si no quieres masticar cada uno de los botines de nuestro equipo más vale que no se te ocurra aparecer ese día- dice Rita antes de colgar.
¿Cómo se supone que reaccione a eso?
Eso fué claramente una amenaza. Y Paulo... ¿porque vendrá aquí? ¿el quiere verme? ¿que le diré si nos encontramos?Y ahí vienen mis preocupaciones de nuevo...
Los autos de atrás comienzan a pitar y finalmente me despierto. Comienzo a avanzar y antes que pueda aclarar mis pensamientos pasa algo.
Narra Rita:
Termino de preparar el desayuno favorito de mi hermano: panqueques y frutillas. Sirvo un poco de jugo de naranja en un vaso y finalmente voy a dejarlo a su habitación. Hace mucho tiempo que el no sale de ahí, el es un chico muy callado y la mayoría del tiempo prefiere estar solo en su cuarto en lugar de disfrutar de su tiempo libre como un chico normal.
Me pongo frente a su puerta lista para tocarla pero puedo escuchar su voz y rápidamente me escondo tras la pared.
-En Febrero se jugará el próximo partido de mi hermana contra Barcelona- dice Paulo mientras habla por teléfono con alguien -Podré ver a Isabela después de mucho tiempo y
... tal vez le gustaría salir conmigo-El no se da por vencido con Isabela y eso le está afectando, si el sigue tras ella no se dará cuenta que aún hay más chicas en el mundo y tal vez no se enamore de otra que no sea Isabela.
Dejo la bandeja en el piso y me regreso a la cocina sacando una bocanada de aire. Me decido de llamar a Isabela y dejarle claro que no se le ocurra estar en nuestro partido aunque eso signifique recibir una falta por parte de su club. Pero todo es por el bien de Paulo.
Narra Philippe
Acabo de terminar el entrenamiento y me dirijo al estacionamiento junto con Thiago, antes de subir al auto recibo una llamada de un número sin registrar.
-¿Aló?- digo yo y una mujer me da una noticia que nunca pensé recibir - ....¿Isabela...?-
ESTÁS LEYENDO
𝐀𝐝𝐢𝐜𝐭𝐚 𝐚 𝐭𝐢 💘𝐏𝐡𝐢𝐥𝐢𝐩𝐩𝐞 𝐂𝐨𝐮𝐭𝐢𝐧𝐡𝐨💘
Fanfiction"𝙸𝚜𝚊𝚋𝚎𝚕𝚊 𝚢 𝙿𝚑𝚒𝚕𝚒𝚙𝚙𝚎"... 𝙴𝚕𝚕𝚊 𝚙𝚎𝚗𝚜ó 𝚚𝚞𝚎 𝚎𝚜𝚘𝚜 𝚗𝚘𝚖𝚋𝚛𝚎𝚜 𝚜𝚘𝚕𝚘 𝚎𝚜𝚝𝚊𝚛í𝚊𝚗 𝚓𝚞𝚗𝚝𝚘𝚜 𝚎𝚗 𝚜𝚞𝚜 𝚜𝚞𝚎ñ𝚘𝚜, 𝚙𝚎𝚛𝚘 𝚊 𝚟𝚎𝚌𝚎𝚜 𝚕𝚘𝚜 𝚜𝚞𝚎ñ𝚘𝚜 𝚜𝚎 𝚑𝚊𝚌𝚎𝚗 𝚛𝚎𝚊𝚕𝚒𝚍𝚊𝚍 ¿𝙽𝚘?