Todo inicia normal, un nuevo año escolar, me sentía indiferente porque ya sabía que iba a ser todo lo mimo de siempre, estar con mis amigos, intentar no meterme en algún lío y salir siempre adelante...
Pero cuando llega el momento en donde todos los alumnos de cada año son asignados a sus salones solo volteé y mire a una chica ella era dos años menor que yo pero la miré y simplemente no pude dejar de hacerlo sentí algo que nunca había sentido al mirar a una persona, sentí amor, de verdad se me hacía un poco difícil de creer en el amor a primera vista pero esta vez el destino me había dado una perspectiva diferente... Un poco más baja que yo, ojos color café oscuros, una cabellera larga y de color oscuro, nariz perfilada, con ortodoncia entre sus dientes color plateado, y unos hermosos labios y de piel blanca (Pero se notaba que había sido bronceada por el sol), para mí ella era en pocas palabras "Perfecta" aunque no pudiese haber escuchado su nombre ni supiese quien era me encantó desde el primer momento en que la vi.
En dos meses de clases fui incapaz de acercarme a ella por miedo y porque soy muy tímido (En especial si iba a intentar hablar con la chica que me gustaba), solo sabía que estaba en el octavo grado. Un día la vi terminar de hablar con un chico de noveno grado y al terminar su platica se fue y al chico le hice una sola pregunta, oye ¿Como se llama esa chica con la que terminaste de hablar?, él con un tono arrogante me dijo que eso no era de mi incumbencia y que ella tenía novio, al oír esas palabras me sentí devastado e incluso que mi corazón se rompió en miles de pedazos pero si quería tener una información concreta debía seguir indagando así que eso fue aunque dolió escuchar lo que me dijo ese chico lo afronté y decidí no darme por vencido.
Tiempo después (una semana) tenía que ir al club que me correspondía (Ese era el club de música) ya que no encontré otra cosa que me llamara la atención entre los demás clubes, entre a ese salón de clases y que sorpresa la que me llevo, ella estaba allí sentada, mi corazón comenzó a latir muy rápido, tanto que creí que iba a salirse de mi pecho, yo me senté en la parte de enfrente del salón mientras que ella se sienta tres asientos detrás de mi, para disimular todo lo que sentía vi una guitarra y empecé a tocarla, enfocando mi atención en su mástil para no tener que mirar hacía cualquier otra parte, toqué un poco la guitarra y de pronto se me ocurrió tocar y cantar una canción que al parecer todo el salón conocía "Nena Maldición" y cuando subo mi cabeza veo que los chicos que estaban en el aula me rodeaban mientras me acompañaban interpretando ese hermoso tema, cuando menos me lo esperaba ella me miró y me sonrió, siendo sincero no creía que iba a tener la oportunidad de poder ser el centro de su atención por un momento, pero la tuve y sentí mariposas en el estomago por solo haber cruzado una mirada con ella supongo que notó que yo quede atónito con solo mirarla directamente a los ojos y ver que ella me devolvía la mirada, pero después de que deje de tocar todo el mundo se fue a sus asientos cuando el profesor llega al aula, inmediatamente pasa la lista de personas anexadas a dicho club, pero lastimosamente no pude escuchar su nombre por segunda vez y eso dificultaba las cosas y en ese momento como formaba parte de la sección de canto (Al igual que yo) el profesor le ordenó que cantara algo y recitó "No hay nadie más" de Sebastián Yatra yo quede simplemente fascinado .
