A pesar del tiempo que pase, te seguiré amando como la primera vez

Prologo

Capitulo  prologo.

 

Ahí se encontraba, en aquel  cuarto oscuro, un pequeño de tan solo 14años aferrándose aquel  peluche de pororo que tanto añoraba, por sus pequeñas mejillas se derramaban  una gruesas lagrimas, ¿La causa?, se encontraban nuevamente sus padres peleando, se escuchaban golpes provenientes de fuera de esa habitación oscura, por cada golpe el pequeño cerraba más sus ojos y para no poder escuchar aquellos golpes o lo que decía su padre a su madre al ser golpeada por su  el hombre que era su esposo. Tapándose sus oídos, soltando en el acto al peluche que sostenía entre sus brazos.

¿Otra causa por la cual peleaban?, el pequeño, su padre  siempre golpeaba a su madre para descargar toda la irá que tenía, por culpa de ese ‘’fenómeno’’ si fenómeno, el pequeño niño, no era un humano común y corriente un niño ‘’normal’’ como debería ser, era una especia de ‘’hibrido’’ el poseía unas pequeñas orejas  peludas y esponjosas de color blanco como las de un gato, en efecto era mitad gato, el había nacido así.

Déjenme contarles cómo es que comenzó todo.

En un pequeño pueblo, no casi tan poblado vivía una pareja de recién casado, ya llevaban una vida de felicidad, aquel lugar era tan cómodo para vivir. Pasando los meses ,la mujer se quedo embarazado, era el primer hijo que tendrías ,si, ya se había enterado que sería un varoncito, estaban tan felices, porque pronto llegaría un nuevo miembro de su familia, porque ellos eran dos solamente ya una familia  pequeña, en esos meses , todo era alegría, felicidad, compraron todo lo necesario para su pequeño cuna, ropa, en fin todo lo que necesitaba, hasta ya habían pensado el nombre del bebé, se llamaría ‘’KyungSoo’’, y así pasaron los meses, entre chequeos que se iba hacer la mujer, su esposo trabajando con más ganas, en conclusión estaban ilusionados, pero en el octavo mes del embarazo, se detecto un problema, el doctor que había estado dando los cuidados adecuados , noto en una de sus ecografías del octavo mes que en la cabecita del bebé había crecido algo parecido a ‘’cuernitos’’, al ver esto el doctor se sorprendió mucho, que lo obtuvo oculto a los padres de esté, eso lo vería al nacer que era lo que había sido aquello.

Al fin llego el mes esperado un 12 de enero, eran las 2 de la mañana cuando la mujer sintió los dolores del parto, que no hubo tiempo para llevarla al hospital el parto sería en aquella casa ,llamarón al doctor que atendía a su mujer. Llego el momento donde su nacimiento  de aquel bebé, ahí también estaba el doctor que estuvo al cuidado de aquel bebé que pronto nacería y su esposo ,el momento llego, después de 2 horas de parto ,en aquella habitación se escucho el llanto de un bebé.

Solo un momento  basto en ver aquel bebé, los ojos del doctor se abrieron como platos al ver aquellas orejas, era una pequeñas orejas de gato, tanto como los padres del recién nacido se sorprendieron lo que veían, la tensión se sintió en aquel lugar.

Su madre lloraba, no lloraba de lo que veía si no de la emoción de ver aquel ser que estuvo en su vientre durante  nueve meses,era hermoso ante sus ojos, a ella no le importaba lo que tenía en su pequeña cabecita, no, si no de la emoción de al fin ver lo, era  de tés blanca igual que su madre, ojos grandes, hermosos, sus labios pequeños y esponjosos, la mujer extendió sus brazos para que se lo dieran a su pequeño, el doctor se lo paso, ya envuelto en sus mantitas con pequeños dibujitos estampados de ‘’pororo’’ que la mujer escogió especialmente para su pequeño, la mujer lo meció en sus brazos dándole protección en ellos . El hombre veía al bebé con un desprecio, si desprecio, al ver aquella cosa que era su ‘’hijo’’, salió rápidamente de aquella habitación ya no podría estar más ahí, salió al pasillo, bajo las escaleras de su casa, dirigiéndose a la cocina tomándose de un solo golpe un vaso de licor, detrás de él salió el doctor.

—Nadie tiene que saber sobre eso — Dijo el hombre, el doctor solo llego asentir con la cabeza  mirándolo dudoso .

—¿Pero por qué? .

—Solo no diga nada.

—Hm…No se preocupe, no diré nada.

Desde ese día, el pequeño KyungSoo no salía de casa, casi todo el tiempo estaba encerrado en su casa, no sé sentía solo, porque siempre estaba ahí su mamá, con ella era feliz, porque ella jugaba con él , le leía cuentos , era feliz por las mañanas y tardes siempre estaba abrazado a su peluche pororo, aquel lindo pingüinito al cual lo había llamado ‘’Kai’’, que esté era su mayor tesoro porque su madre dijo que lo había escogido especialmente para él y no solo ella también su padre y por eso es que lo cuidaba bien, y andaba con ‘’Kai’’por aquí y por allá, le gustaba todo lo que su mamá le compraba y si, todo incluía a pororo.

Si su felicidad duraba hasta la tarde ¿Y Por qué no era feliz por las noches?, su padre, esa era la causa por la cual no era feliz por las noches, su papá llegaba por la noches de su trabajo, y el pequeño niño de tan solo 5 años en ese entonces, se escondía rápidamente en su habitación, porque siempre que se topaba con su papá lo miraba con infinito desprecio si no también causa la discusión entre sus padres, su papá insultándolo al pequeño llamándolo ‘’fenómeno’’ o ‘’ese niño no es mi hijo, no lo quiero ver’’ y su madre siempre lo protegía diciendo ‘’no es un fenómeno, el que no haya nacido igual que los demás niños no lo hace diferente es un niño único’’ , el pequeño de ojos grandes lloraba al escuchar a su madre defendiéndolo y lloraba más fuerte cuando escuchaba golpes, siempre estaba abrazo a su peluche, llorando en un rincón o encerrado en su armario.

Y así fueron los siguientes años, llenos de desprecio e ignorado  por parte de su padre golpes, a causa de que su madre lo defendiera, lágrimas.

Al cumplir los 6 años, el pequeño KyungSoo tenía que ir a la escuela, tenía miedo, al ser tratado o que esas miradas de desprecio lo mirasen. Pero su madre le dio la confianza diciendo que todo estaría bien. No entro a kínder directamente salto al primero de primaria porque era un niño inteligente y gracias a la ayuda de su mamá, en enseñarle lo necesario.

El cada mañana se despertaba temprano, vestía su uniforme, sonriendo al espejo, porque las mañanas eran felices para él, bajaba a desayunar con muchos ánimos, abraza a su mamá dándole los ‘’buenos días’’ antes de salir de casa, su madre acomodaba su pequeño ‘’gorrito’’ sobre su cabeza para así no notarán aquellas ‘’orejitas’’, para que el pequeño no tenga problemas con los profesores, su madre hablo con la directora de la escuela para que lleve siempre puesto aquel gorrito.

Siempre al llegar aquel lugar el pequeño de orejitas se ponía nervioso, ¿Por qué? Lo miraba como si fuera un bicho raro, por llevar puesto siempre aquel gorrito, entra a su salón todas las miradas de sus pequeños compañeros se posan en él ,causando que el pequeño pelinegro baje la mirada, volviéndose un niño tímido, caminando hacía su asiento de siempre, al fondo, cerca de la ventana para ver aquel bello paisaje, del jardín de la escuela, siempre tan solitario, con su mirada perdida, no tenía ningún amigo ahí suspira leve cierra sus ojos, cae una pequeña lagrima …

 

 

 

Él quería que su papá lo quisiese como lo quiere su mamá o tener por lo menos un amigo con el cual no estar solo.