Little Monster. [✔]

Loki fue despertado por un conocido llanto de su pequeño Peter, observó a su alrededor pero no estaba el pequeño donde lo había dejado, a su lado.

- Peter... - Suspiro. - Volvió a escuchar el llanto, miro al techo de su habitación. - Ahí estas... Baja...

Peter lo miro y le sonrió, bajando de sus telarañas.

- Hamble... - Hizo un pequeño puchero, Loki lo tomó en sus brazos.

- Vamos a comer, seguramente tus padres ya deben estar despiertos.

Ambos caminaron por el pasillo, al llegar a la sala no encontraron a nadie.

Loki siguió su camino hasta llegar a la cocina, observando a Natasha preparando el desayuno.

- ¡Tía! - Grito Peter, sobresaltando a la gran Nat quien respondió, tomando un cuchillo y apuntando a Loki.

- Oh vamos, Si me vas a matar deja le tapo los ojos al pequeño.

Nat suspiro retirando el cuchillo.

- Hola pequeño... - Peter le sonrió y continuó jugando con el cabello de Loki.

- ¿Donde esta Steve? - Preguntó Loki.

- ¿No lo sabes? - Contestó Nat, y este lo miro desentendido. - Salieron de vacaciones, te dejaron una nota en tu puerta.

Loki puso los ojos en blanco, dejó al pequeño en su sillita y camino rápidamente a su habitación.

"Perdón, enserio perdón, no quería dejarte solo con Pet pero Tony dijo que estaría bien contigo. Se que lo vas a cuidar muy bien.

Regresaremos en una semana, no te olvides de alimentarlo y asearlo.

Gracias por existir): ❤️"

- Idiotas. - Se apoyo en la pared.

- ¡Loki, araña bebé tiene hambre! - Grito Nat desde la cocina.

Loki suspiro y camino de nuevo hacía donde estaba el pequeño.

- Bien me iré. - Nat tomo el último sorbo a su café.

- ¿Tu también? - Loki la miro mientras tibeaba la leche del pequeño.

- Yo sólo vine a ver que recibieras el recado y como ya esta pues me voy. - Tomo a Peter y le dio besos en todo su rostro. - Cuida muy bien a Loki ¿Okey pequeño? - Peter sonreía. - Bien...

Loki se acerca ya con el biberón del pequeño en mano, tomo a Peter con cuidado.

- Hasta luego, niñero.

Nat se despidió, dejando a Loki con el pequeño de un año en sus manos.

- Mierda Tony te odio.

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- ¿Peter? ¿Donde estas? ¡Es hora del baño! - Un exaltado Loki gritaba por toda la casa, buscando al pequeñin.

No sabía en qué momento el pequeño había desarrollado estas telarañas que aunque eran divertidas para el pequeño, para los adultos era un estrés ya no buscarlo en el suelo, si no ahora en las paredes y en el techo.

Y ahí se encontraba Loki mirando cada rincón de cada habitación, moviendo cosas y cerrando las puertas con su magia.

- Te encontré. - Lo divisó en la esquina del techo del taller de su padre.