El comienzo del Fin

La muerte no es inevitable.

Punto de vista de King.

Comenzamos a acercarnos a la tienda de antigüedades, por suerte para nosotros, el local estaba abierto y no hubo necesidad de forzar la puerta del local, agradecía eso a las diosas por que no quería enfrentarme a ninguna criatura. Todos nos adentramos para buscar algo que nos llegara a ser de utilidad, sin embargo, a Escanor no le importo en lo absoluto y fue directo por aquella hacha de batalla que tanto deseaba, cabe resaltar que era demasiado curiosa, solo podía ser empuñada por una sola mano pero a eso no le importo Escanor y la tomo con mucha facilidad.

-Al fin te tengo, la famosa hacha divina "Rhitta" esta ahora en mis manos-Comento bastante feliz mi amigo, desde que comenzó a investigar sobre las legendas de Britania, le llamo mucho la atención la legendaria "guerra santa" en donde los antiguos clanes se enfrentaron para sellar al clan de los demonios y esta arma fue participe en aquella guerra. Pero esta solo era una replica que un antiguo rey mando a fabricar con sumo detalle. Los demás igual buscaban objetos de batalla, Meliodas consiguió una daga que tiene por nombre "lostvayne", Ban encontró un "nunchaku triple", Gowther encontró un arco con varias flechas, Helbram consiguió una espada bastante rara, por mi parte nada me llamo la atención hasta que fui al almacén y encontré una lanza, me llamo bastante la atención que decidí tomarla y reunirme con mis compañeros en la recepción.

-King,¿que tipo de lanza es esa?-Pregunto Ban, yo no sabia que decirle, la verdad tenia esa misma pregunta yo.-Es la legendaria lanza sagrada "Chastiefol", al parecer en esta tienda tienen replicas de aquellas armas que las leyendas cuentan en la guerra santa-Contesto Gowther bastante serio, a el se le daba bien investigar y leer  libros de diferentes índoles para aprender más de nuestro pasado como reino.

-Explícanos sobre esa guerra santa-Menciono Ban ya irritado pero Gowther decidió contar esa historia después, teníamos un objetivo de llegar a la estación de policía. Nos pusimos en marcha hacia ese lugar, evitando tener peleas tontas, aun que ya tenemos una arma silenciosa a larga distancia que era el arco de Gowther, de vez en cuando lo utilizaba para  despejar el camino de seres infectados.

En un par de minutos nos encontramos cerca de la estación, nos ocultamos en un callejón y me dispuse a contactar con Hendrickson.-¿Hola?,¿comandante, esta ahí?-No obtuve respuesta inmediata pero a los pocos segundos la señal blanca se convirtió en sonido.-¿King?, chico ¿en donde te encuentras?, esto a empeorado, varios maleantes que teníamos arrestados aquí decidieron escapar de sus celdas y fueron infectados, ahora hay demasiados de ellos aquí, no se como te las puedas arreglar...-Comento bastante triste pero yo no me iba a rendir, teníamos que salir de aquí y llegar al refugio.

-No se preocupe, mis amigos y yo conseguimos objetos para defendernos, nos servirán para abrirnos paso a donde usted esta-Estaba decidido en actuar, si teníamos que luchar para sobrevivir lo haría, el comandante nos deseo suerte y nos encaminamos a la estación.

-Tenemos que abrirnos paso, les dire un par de cosas con respecto a esos infectados, no intenten darles golpes en los costados de su cuerpo, lo más efectivo es darles un golpe en la cabeza, eso los deja fuera de combate, Elaine, Merlin, Elizabeth y Diane ya que ustedes no tienen algo con que defenderse se quedaran en el centro mientras las protegemos. Helbram y Arthur, ustedes tienen algo con filo así que se quedaran a lado de las chicas para evitar que las muerdan, bien ¡en marcha!-Termine de comentarles la idea que tenia y nos adentramos al lugar.

Cabe destacar que todos nosotros dábamos golpes a matar, nadie quería ser mordido y perder la vida con una simple mordedura. Llegamos a la parte donde estaba resguardado Hendrickson, el se encontraba en el almacén y estacionamiento de la estación. El nos dio paso a este lugar y cerro la puerta tras nosotros.

-Me alegra que estén sanos y salvos, al ser jóvenes tienen convicción y determinación  de lucha-Menciono con tono de orgullo, todos nosotros nos sentíamos elogiados por sus palabras, después de esas palabras, Hendrickson se acerco a mi y me tomo del hombro.-Chico tienes buena determinación, por lo que veo tu guiaste a tu equipo aquí y sin recibir ninguna baja, debes de estar orgulloso- En verdad sus palabras me maravillaban, el nos dijo que debíamos descansar un poco, nos ofreció algunas provisiones que estaban en el almacén, comimos y hablábamos de cosas sin importancia, a decir verdad me sentía afortunado de estar con ellos.

-Comandante,¿sabe como ocurrió esto?-Pregunto mi hermana, al parecer al oficial la pregunta lo incomodo un poco pero contesto aquella pregunta.

-Hace unos días recibimos varios reportes de personas con comportamientos sumamente agresivos, intentaban morder a las personas con las que se cruzaba, acabamos con algunos de ellos y al momento de hacer la investigación de autopsia nos dimos cuenta que tenían en común un virus bastante anormal, los comportamientos eran semejantes al virus de la rabia en los animales pero no era ese virus, si no uno nuevo, todos los peritos de la estación se encontraban confundidos, pero hubo algo bastante extraño, la organización Sacred Knight reclamaba los cuerpos para poder investigarlos, pero en pocos días se convirtió en un caos y henos aquí en esta situación- Saber eso aumentaba más mi odio hacia ellos, por su ambición todo esto se fue al carajo y la raza humana esta al borde de la extinción.

-Lo que dice Hendrickson es verdad, yo era becaria en uno de sus centros de investigación, llevaron varios cuerpos para estudiarlos y extraer ese virus para su experimentación, nunca me dejaron ver aquellas pruebas pero de un momento a otro a todos nos evacuaron y nos mencionaron que teníamos la semana libre y por lo visto no nos querían tener ahí por sus experimentos-Comento Merlín bastante seria, todos la miramos sorprendidos, ella sabia de eso y ahora esta en esto con nosotros.

-Por lo menos estas bien, así que, debemos de ponernos en marcha para escapar de aquí-Comento Helbram bastante entusiasmado, todos afirmamos sus palabras y decidimos subir al camión algunas cosas, como provisiones, algunas armas y equipo de protección.-Bien todo esta listo, suban al camión, iré a abrir la compuerta y saldremos de aquí-Comento Hendrickson. La chicas subieron primero, nosotros nos quedamos aun abajo por si algo sucedía y para nuestra mala suerte eso sucedió.

Al abrir la compuerta un infectado mordió al comandante, el le dio un disparo en respuesta causando mucho ruido, llamando la atención de los demás, Helbram se percato de esto y corrió a auxiliarlo.

-Comandante,¿esta bien?-El miraba bastante preocupado a Hendrickson.-No chico, me han mordido, estoy acabado, deben irse de aquí, yo los distraigo- Comento como ultimo recurso el comandante, yo no me lo podía creer que una persona tan noble haya sido infectada, me acerque a Helbram y trataba de llevarlo al camión pero este se negaba.-No podemos dejarlo, el nos ayudo, podemos llevarlo al refugio y podrán curarle-Intentaba excusarse pero yo no quería que a el le pasara algo, el era como mi hermano. Después de tanto forcejear unos infectados se adentraron y corrían tras nosotros, yo en ese momento me paralice, uno de ellos se lanzo a morderme, yo no sabia que hacer estaba totalmente paralizado pero no conté que Helbram se interpuso recibiendo la mordida el.

-¡Helbram!,¿que has hecho?-Lagrimas salían de mi rostro, sabia que lo perdería y no pude evitar que eso le sucediera.-Harlequin, vete ahora, yo me encargo de ellos, ¡Ban! subelo y no dejes que baje- Sentí como los brazos de Ban me rodeaban y me atraían con fuerza para subir al camión, yo intentaba zafarme de su agarre pero me era imposible.-Prométeme una cosa Harlequin, protege a Elaine y a los demás, ademas quiero que al fin seas feliz con esa chica, se que no es momento pero debes de confesar tu amor por ella, te quiero amigo-Acto seguido Meliodas arranco el camión y atravesamos la cerca que rodeaba el almacén saliendo a toda prisa, pude ver a mi amigo despedirse y luchando junto a Hendrickson para darnos tiempo de huir.

-¡Helbram!- Grite con todas mis fuerzas mientras que lloraba, le había perdido y todo por esa estúpida organización, no sabia que hacer, solo me tumbe en el suelo de la parte de atrás del camión para sacar ese sufrimiento, solo pude sentir un cálido abrazo de aquella chica diciéndome "Todo estará bien..."

Aquí termina el tercer capitulo de esta historia. Lamento la tardanza tenia proyectos finales de mi preparatoria que entregar y aun no acabo pero tuve un pequeño espacio para traerles otro capitulo a ustedes.

Ya estoy a punto de salir de vacaciones pero tengo que entregar todo así que los capítulos tardaran un poco, solo un poco je je.

Sin más que agregar,¡Hasta el siguiente capitulo!