"Bethany, despierta, llegas tarde al insistuto" es lo primero que oigo al abrir los ojos, mi madre llamándome para que me despierte. Dios, no puedo levantarme, estoy muerta de sueño, ayer me acosté a las 3 de la madrugada leyendo historias de miedo. Lo sé, algo friki, ¿y qué? Hago un esfuerzo enorme para levantarme de la cama e ir como puedo al baño. Una vez allí me cojo un moño mal hecho en mi cabello castaño y me lavo la cara. Por fin consigo que mis ojos verdes se vean verdes, y no rojos. Voy hacia la cocina e intento comer algo, aunque la verdad es que al final solo como una galleta, no tengo hambre. Vuelvo al baño y me lavo los dientes, después de esto, una vez en mi cuarto, me pongo unos vaqueros negros con mi camiseta de la banda "Misfits", unas converse blancas, cojo la mochila y me dirijo al salón.
-Buenos días Beth, por fin te veo la cara esta mañana. -Me dice mi padre, que está sentado en el sofá bebiendo café y leyendo el periódico, con su típico sentido del humor.
-Sí, ya, esto... tampoco hace mucha falta que me veas la cara, no la tengo muy presentable. -Digo en tono monótono.
-Que va cariño, siempre estás preciosa. -Sinceramente, no se que coño hace mi padre, que hace que incluso por la mañana, aparezca una sonrisa en mi cara.
-Que tengas un buen día papá. -Le digo. Dicho esto me acerco a él y le doy un beso en la mejilla.
Mi madre ya se habrá ido a trabajar a la peluquería, y mi padre se va dentro de poco al instituto a trabajar, por eso solo me despido de mi padre, y salgo de mi casa.
***
-¡Hey, Be, espera! -Escucho la voz de Dean detrás mía, así que me paro en seco, y le espero.
Dean es uno de mis amigos, ya sabéis esos con los que salgo gracias a mi mejor amiga, Lauren. Casi todo mi grupo me llama Beth, excepto Dean y Lauren, que me llaman Be.
-Hombre, ¡si es Dean Humphrey! ¡Cuánto tiempo hacía que no nos veíamos! ¿Eh? ¿Cuánto exactamente, 17 horas? -Bromeo.
-Mira eso, si Be está de buen humor... ¿a qué viene eso Bethany? -Me pregunta.
-¿El qué?
-Vamos, algo te ha pasado, no sueles estar de tan buen humor. -Dice-
-¡Eh! ¿Qué insinuas, que suelo estar de mal humor?
-Yo no he dicho eso Be solo digo que...
-Demasiado tarde. -Le interrumpo a la vez que le cojo los apuntes que lleva en la mano y me voy corriendo.
-¡Beth, eh, no, espera! -Oigo su lejana voz ahogada y sé que me está siguiendo, así que me paro para reírme, ya ha sido suficiente.
-Muy mal Dean, muy mal, muy lento, vas perdiendo facultades, eh. -Le digo, casi ahogada de la risa.
-Eres una puta muy puta Bethany. ¡Pensaba que los ibas a tirar o algo! -Dice mientras me coge los apuntes. -Y sabes que hoy tengo un examen muy importante y los necesito.
-Vamos Dean, ¿en serio crees que te tiraría los apuntes? -Digo con voz de niña buena.
-Sí, sí, y no pongas esa voz porque tú sabes bien que lo harías. -Se ríe.
-Sí bueno, tienes razón. -Me río.