CAPÍTULO 4

339 30 13
                                    

“VANESSA" dijo Brooke cansada mientras la morena la miraba divertida “Necesitas entender que yo te estoy cuidando por lo tanto no tienes que hacer nada”


Luego de que Silky se haya ido. Brooke preparó una sopa que hacía su abuela en Canadá cuando era pequeña y se encontraba enferma. Pensaba que tal vez podría ayudar a que Vanessa mejore. Ella recordaba las noches heladas con fiebre y a su abuela con un tazón de sopa caliente que iba a hacer que ese maldito virus se vaya de su organismo como le decía su abuela.


“No quiero que hagas todo Brooky" dijo Vanessa mientras bajaba de la mesada de la cocina y quedando enana al lado de Brooke “Yo puedo ayudarte" le dijo.


“Claro que no, tienes fiebre y dolores musculares Vanjie. Además quiero hacerlo, traje todo esto para ti. Déjame ayudarte” dijo Brooke sonriéndole.


Vanessa volvió a subir a la mesada, dejando sus pies colgando y mirando a Brooke con un brillo en los ojos que antes no tenía.


“Gracias” dijo mirándola “Lo digo enserio. Nunca nadie hizo algo así por mi" Agachó su cabeza mientras recuerdos pasaban por su mente


“¿Qué cosa? Es solo una tonta sopa que hacía mi abuela” Brooke miró a Vanessa confundida


“Cuidarme" dijo finalmente Vanessa mordiéndose el labio para no llorar “Nadie me ha cuidado. Nunca nadie preparó alguna sopa para mi cuando lo necesitaba. Gracias por estar aquí, en verdad lo aprecio” Dijo Vanessa para luego abrir sus piernas y atraer en un abrazo a Brooke.


Brooke la abrazó tan fuerte que se asustó. Sabía que necesitaba abrazarla. Sentir el calor de Vanessa hizo estremecer a la rubia. Las pequeñas manos de la morena estaban alrededor de el cuello de Brooke y los brazos de ésta alrededor de la pequeña cintura de Vanessa. Brooke inmediatamente pudo sentir el olor que siempre la volvía loca en la oficina. Era Vanessa. Brooke dudaba si era un perfume, era intenso, dulce pero a la vez suave. Difícil de describir.


Estuvieron varios segundos así mientras Brooke Lynn se tambaleaba al compás de la música que provenía de lo que ella suponía que era la habitación de Vanessa. En un momento sintió que la pequeña movía el pelo rubio de su hombro y lo reemplazaba por su cabeza oliendo el cuello de Brooke pero tratando de que la rubia no se diera cuenta. No funcionó. Brooke sonrió ante la acción de Vanessa y la misma se separó de ella. Brooke al instante sintió frío en todo su cuerpo y la necesidad de que la morena esté de vuelta alrededor de sus brazos.  Vanjie la miraba fijamente luego se acercó a la cara de Brooke con vergüenza y depósito un pequeño beso en su mejilla haciendo sonreír a Brooke.


La rubia sale de entre las piernas de Vanesa y revuelve la sopa y dice "Esto ya casi está, ve a acostarte que yo te lo llevó” Vanessa se baja de la mesada y Brooke nota los pies chiquitos de Vanessa contra el suelo “Omg Vanessa estas descalza, te vas a resfriar y será mucho peor" dijo Brooke mientras levantaba a Vanessa como una bolsa de papa para que no toque el suelo


“BROOKEEEEE ¿QUÉ HACES?” dijo Vanessa riendo mientras se bajaba la remera “Déjame ponerme un maldito short por lo menos"


Brooke no había notado que Vanessa debajo de la remera solo tenía una pequeña tanga dejando al descubierto su culo. Sintió que ya no había oxígeno. Su culo era perfecto y lo tenía tan cerca. Se relamió los labios y bajó a Vanessa.


“Lo siento” dijo Brooke mientras regresaba a la cocina en busca del tazón de sopa.


“No hay problema” dijo Vanessa “No es algo que nunca hayas visto. Además no me molesta que tu lo mires”


Brooke sentía sus mejillas arder. Era eso que siempre la hacía parecer un fósforo. El efecto Mateo. Agarró el tazón y lo llevo a la habitación, en ella estaba Vanessa ya acostada y con una gran sonrisa.


“Aquí tienes. Espero que te guste porque realmente es lo único que sé hacer" dijo Brooke riendo y Vanessa abrió sus ojos como platos.


“¿Es un chiste no? ¿Brooke solo sabes hacer la sopa de tu abuela? Que por cierto está riquísima” dijo Vanessa.


“No, es cierto. No sé cocinar, es como que todo me queda crudo o quemado. Me estreso demasiado" Dijo brooke haciendo un puchero.


“Maldita sea. Tienes unos 30 años y no sabes cocinar” dijo Vanessa riendo “¿Y que comes?”


“La señora que trabaja en mi casa me hace la comida o me la deja en el congelador" dijo Brooke levantando los hombros “No viviría sin microondas”


“OMG, si mi madre escuchara eso le agarraría un paro cardíaco. Aparte ¿Cómo pagas una maldita sirvienta? A mi me alcanza y sobra el sueldo pero no para una sirvienta” dijo mientras tomaba su sopa.


“Es que no es mi único trabajo" Vanessa la miró confundida y sorprendida esperando que la rubia se explique “Soy Ingeniera. Estudié ingeniería primero y luego abogacía” dijo Brooke restándole importancia.


“¿INGENIERA? Maldita sea Brooke no eres solo hermosa sino malditamente inteligente”.


El efecto Mateo volvió. Brooke sentía el calor en sus mejillas, sabía que estaba roja pero no quería que Vanessa lo notara así que bajó su cabeza y respondió.


“Gracias” Brooke le sonrió “Ingeniería lo estudié ya que toda mi familia es Ingeniera. Mi padre me manipuló prácticamente para que estudie Ingeniería, decía que uno de sus hijos tenía que seguir el legado familiar. Además de que piensa que los abogados son mediocres si no tienen familia que sea abogada o unos ridículos apareciendo en programas de televisión. Realmente no es que odie ser ingeniera pero amo las leyes” dijo Brooke mirando a Vanessa.


“Los padres y sus legados familiares. Es una mierda que hayan obligado. Odio cuando la familia se mete en tus sueños" dijo Vanessa poniendo los ojos en blanco.


“Asi que…” dijo Brooke “¿Estuviste con chicas?” Vanessa abrió los ojos como platos y casi se atraganta con un pedazo de zapallo que estaba en la sopa a lo que Brooke se rió.


“Si… quiero decir, se supone que soy bisexual pero las mujeres son mi debilidad por mucho" dijo Vanessa mirando a Brooke.


“Lo sé, las mujeres son lo mejor” dijo Brooke.


“¿Y vos? Puedes no responder eh" dijo Vanessa.


“Soy lesbiana” dijo Brooke.


“Lo sabía” dijo Vanessa para luego taparse la boca con la mano “Lo siento tanto… no quería decir eso, lo siento”


“Esta bien” dijo riendo “No lo disimulo” dijo guiñandole un ojo.


“Y no tendrías por qué hacerlo" dijo Vanessa sonriendo.


La noche se pasó entre risas y anécdotas. Cuando Brooke llegó a su casa y se acostó a dormir una sonrisa que se mantuvo en sus labios recordando lo bien que hizo en seguir sus impulsos.

LET ME LOVE YOU (branjie)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora