One step

Jack Daniels

Del odio al amor solo hay un paso...

¡No! , el que allá dicho esa frase puede tomar un tenedor y comer sus palabras pedazo por pedazo, para pasar del odio al amor o mejor dicho, follar como conejos, solo se necesitan los siguientes ingredientes, tomen nota para el desastre:

-100 gr de estar hasta la corona de estrés por el trabajo.

- 80 cucharadas de discutir con un empleado más necio como el solo.

- 1 botella de Jack Daniels.

-2 Idiotas que decidan hacer una competencia de quien puede beber más.

Ahora solo revuelva todo, asegurándose de combinar el espíritu de competencia de ambos hombres, su orgullo propio, y el deseo de sublevar al otro.

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-!Te la metieron!-El de cabello rojo se reía tan fuerte que llamo la atención de toda la parte atrás de la cafetería.- !YO SABIA ERAS PASIVO¡,!jODER LO SABIA¡

Kengo sin poder soportar más los comentarios de su amigo sin pensarlo ni un poco dejo el dinero de su café sobre la mesa y salió del local dejando de lado al de cabello largo, claro la pequeña molestia se encontraba siguiéndolo en la calle, sonriendo tan divertido como un niño con un juguete nuevo. Colocándose a su lado mientras caminaba de regreso a su apartamento.

-Oh vamos no camines tan rápido, tengo patas cutas* a comparación de ti.-

-Jodete.-

-...No gracias porque al que...-

El hacker de sombrero negro cubrió la boca del otro para arrastrarlo adentro del edificio de vivienda, lo bueno de su prótesis era disfrutar del dolor del otro tratando de liberarse dando mordidas a la mano de metal, Inmovilizo sus brazos en su espalda llevándolo como un criminal de capturado, de hecho le preocupo el hecho de que sus vecinos no lo vieran raro cuando literalmente arrastro a una persona a su apartamento, al entrar soltó a la pequeña molestia la cual por una extraña razón fue a la cocina apenas dejo sus zapatos en su entrada, por su lado necesita ir a sus computadores. Conecto su prótesis para realizar el trabajo con mayor velocidad, necesita entrar al sistema de cámaras de Sol Tecnology, la molestia de cabello rojo se colocó a su lado con una silla de la cocina y un bowl de palomitas en sus piernas, comiendo como un hamster con los cachetes gordos e hinchados.

-¿Qué haces?-

-Te conté que posiblemente abusaron de mí en estado de ebriedad.- Molesto tomo un puñado de palomitas del bowl con su mano libre.-Y te reíste como un pendejo de primera.-

-Lo se fui una mierda, pero es Akira Zaizen de quien hablamos.- Chrissander dejo el bowl en la mesa, mientras sacaba sus anteojos.-La misma persona que logro no tuviera precio mi hermano en la red.-

-¿y?, No es la Madre Teresa de Calcuta.- Kengo miraba de reojo al otro cuando suspiro.-Eres médico forense, piensa porque te llame.-

-Si tienes un vídeo del acto lo agarraras de los cojones, además conozco personalmente al juez de guardia y Ministerio Fiscal, inclusive me permitirías evaluarte de ser necesario.-

-Por eso te traje idiota no necesito tu consuelo, necesito me ayudes a mandarlo al infierno.-

Después de unos segundos en los monitores del hacker aparecieron carpetas con los vídeos de seguridad de la compañía, rápidamente entro a la carpeta que indicaba la oficina de Zaizen Akira, buscando exactamente la hora de los hechos, transfirió el contenido de multimedia a su equipo para comenzar a verlo.

12:00 a.m//13-06-2xxx //Oficina del gerente de seguridad// Zaizen Akira//

Era interesante que la oficina del jefe de seguridad tuviera dos cámara, una cercana a la parte de su escritorio y otra en que mostraba el panorama general del lugar, corrió el video de ambos lados para poder tener una mejor vista de los hechos se notaba estresado mientras revolvía su cabello frustrado ante la montaña de documentos en su escritorio. Se notaba concentrado en su trabajo, hasta que alguien sin permiso entro en la habitación como si nada. Aunque por la hora no era necesario anunciarse Akira esperaba sus invitados tuvieran los modales y la decencia, de presentarse antes de entrar como si nada, claro eso no aplica con su empleador.