1.

348 20 1
                                    

Estaba durmiendo tranquilamente hasta que siento unas pequeñas manitos acariciando mi cara, abrí mis ojos lentamente, dejando ver al pequeño Bruno. Mordí mi labio inferior conteniendo una gran sonrisa.

-Hola mi amor- Acerqué una de mis manos a su mejilla acariciandolo.

-Hola lala- Habló el pequeño con una gran sonrisa.

-Buen día preciosa- Habla Alejo asomándose por la puerta, con un brillo en sus ojos, el cual se le forma al ver que Bruno y yo estamos dándonos amor.

Estiré una de mis manos para que Alejo se acercara. Lo cual obedeció y pude abrazar a los 2 hombrecitos. -No saben lo mucho que los extrañé- Murmuré apenas.

-Te quelo mucho lala- Habló el niño por segunda vez.

-Sos hermoso mi amor, te amo- Me acerqué a la mejilla del pequeño dejando un largo beso en ella.

-¿Y para tu mejor amigo no hay nada? -Alejó me miraba haciendo puchero en sus labios-

Dios me lo morrrrfo Pensé. -Tonto- Agarré la mano de mi mejor amigo entrelazandola con la mía e hice un tirón hasta mí, así podía dejar un beso en su mejilla. -Sos un celoso-

-Dale levantate reina, vamos hijo, así Alaia se cambia- Alzó al pequeño, saliendo por la puerta en dirección a la cocina.
Me levante y aproveche a tender mi cama rápidamente. Luego de eso, decidí agarrar un buzo y una calza de mi ropero. Fui al baño así me tomaba una ducha rápida. Al rededor de unos 20 minutos ya estaba lista, bajando las escaleras.

-¡GORDO!- Grité al ver a mi hermano sentado en el sillón. -No sabes cuanto te extrañé mi amor- Murmuré en su oído mientras estaba tirada encima de el abrazada 

-Yo también diabla, le hiciste mucha falta a este goldito- Hizo un pequeño puchero, el cual me provocó ternura.

Toda la mañana se pasó volando, ya que los 3 incorporados en la casa contaban sus anécdotas en la corta pero intensa gira que han tenido.
En algunas ocasiones sentía la mirada fija de Ale lo cual me ponía incomoda, hace tiempo me está volviendo loca, pero no se si da decirle, ya veo que cago la amistad.

-Alaia, me estás escuchando?- Habló mi hermano con un tono de risa.

-Pendón bebé, me colgué- Negué apenas con mi cabeza y bajé mi vista. Estaba por hablar y justo suena el teléfono de mi hermano provocando que se levante y salga al patio.

-En que pensas?- Siento nuevamente la mirada fija de Ysy-

-En vos gordo- Ups...

•••
Bueno, una cagada ya sé jajaja, lloren conmigo

𝓖𝓻𝓪𝓬𝓲𝓪𝓼 -Ysy ADonde viven las historias. Descúbrelo ahora