Cherry Wine

VII

"Dulce, y correcta, y piadosa.
Yo soy arrastrado por la marea de su respiración.

Y ella lo vale, es divina.
Oigo esta canción todo el tiempo."

...

Soltó un quejido cuando escuchó la alarma sonar estruendosamente sobre el mueble de su habitación. Se estiró con pereza y con todo el dolor del mundo y fuerza de voluntad se levantó de su cómoda y cálida cama, bostezó perezosamente, hoy tenía que firmar un proyecto junto a Kakashi, conociéndolo seguramente no iba a querer ir y se iba a hacer el dormido, el hombre podía ser un genio para los negocios, pero lo flojo no se lo quitaba nadie.

Eran las nueve y media de la mañana, así que casi en piloto automático se duchó, lavó sus dientes y se colocó ropa limpia.

Arreglando sus mangas caminó a la habitación de su mejor amigo

-NEEE BAKAKASHI!- gritó mientras abría la puerta

Su rostro fue de total confusión cuando encontró dicha habitación totalmente vacía, tan pronto como la duda se instauró en su mente, risas entraron por sus canales auditivos, miró hacia atrás, era una pieza de huéspedes especial, que Kakashi casi nunca dejaba que sea ocupada, Obito caminó con el ceño fruncido hasta la puerta y pegó su oreja para escuchar lo que sucedía dentro.

-¿de verdad?- esa era la voz de Kakashi aún riendo

-si!, y después murmuraste algo como "obito, deja esa obeja"- Y esa era Sakura

-no puede ser- reía con fuerza Kakashi

-¿que tipo de sueño estabas teniendo?

-no lo recuerdo

-parece que algo muy bizarro

-no hablo dormido, nunca lo he hecho

-pues lo hiciste, y en mi oído- siguió riendo la mujer

Los ojos de Obito se abrieron como plato, habían dormido juntos, haciendo quizá que cosas

-¿qué estás haciendo?

El pelinegro saltó del lugar asustado

-NADA, NADA, NADA- declaró exaltado el Uchiha

-espiar a la gente está mal- le reprochó el castaño

-lo sé, no fue mi intención- se rascó la nuca nervioso, a lo que Yamato solo negro con la cabeza y rio

-vamos a buscar a Rin, no queremos que vea o escuche esto- habló Tenzo caminando seguido por Obito

Una amarga sonrisa nació de su rostro, él siempre había estado locamente enamorado de Rin, era su todo, era amable, bonita, educada y dulce, todo lo que siempre quiso en una mujer, la amaba desde que eran niños. pero ella estaba enamorada de Kakashi, no podía permitir que ella llorara, sabía que en algún momento iba a suceder, pero su corazón se destrozaría al verla llorar por otro hombre.

Desde que supo que Kakashi estaba interesado de alguna manera en Sakura, se había propuesto conquistar a Rin, iba a sacar todas sus armas, quería enamorarla, evitar que llorara por otro hombre, hacerla feliz antes de que eso sucediera.

...

Un alegre titubeo salía de la oficina de Kakashi, se sentía feliz, hace mucho tiempo que no lograba sentirse de esa manera, había olvidado lo fantástico que era, suspiró suavemente, pero dejando que sus pulmones botaran todo el aire que tenía dentro, se sentía bien, demasiado bien.