PRÓLOGO

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Eran las 10 pm en la ciudad de Panry, la gente ya estaba dormida así que no quedaban demasiadas luces encendidas, sin embargo una fiesta estaba en pleno desarrollo y un joven llamado Fred ya estaba cansado, y además tenía que ir a la Universidad al siguiente día. Quiso despejarse un poco en el parque de la ciudad mientras escuchaba música con sus audífonos.

Conforme el tiempo pasaba las luces se iban extinguiendo una a una hasta que solo el alumbrado público quedo encendido, Fred al percatarse de esto se quito los audífonos- Vaya si que es tarde- dijo mientras iba de regreso a su hogar, vivía solo asi que no tenía mucha presión. Durante el trayecto para salir del parque escuchaba un extraño ruido en los arbustos pero no les presto importancia.

Después de un rato comenzó a sentirlo fastidioso y se puso a buscar de donde provenía aquel extraño ruido, se llevó una pequeña sorpresa al ver que la fuente era de una arbusto que se situaba justo al lado de el. Cuando se aproximó con nerviosismo una extraña cola salio del arbusto era picuda y negra, y emitía un sonido similar al que produce un cascabel.

La cola inicio a adentrarse al arbusto mientras Fred se acercaba cada vez más y más a ese arbusto. Cuando la cola finalmente se desvaneció dentro de este, Fred se vio acompañado por un incomodo silencio por lo que retrocedió, de pronto un objeto pequeño fue deslizado desde el arbusto hacia los pies de este joven.
Al haber tanta oscuridad Fred encendió la linterna de su teléfono, solo para ver que aquel misterioso objeto era una cabeza de conejo ensangrentada.

Lentamente y emanando una aura de terror, emergió de un arbusto una criatura con la complexión de un gato, solo que tenía picos en la espalda, una cola picuda y larga, ojos de un felino y un cráneo muy largo, todo esto acompañado de una piel negra.

-¡Maldicion!- exclamó Fred  en voz baja mientras comenzaba a correr, la criatura emitió un rugido y fue tras de el a una gran velocidad , al estar lo suficientemente cerca de Fred la criatura se abalanzó sobre el para morder su espalda y arrancarle un trozo de piel.

-¡Ahhh! Maldita sea- Fred se lo quito de encima y siguió corriendo en dirección a su casa mientras sentía un horrible dolor en la herida, como si la saliva de eso tuviera un ácido que lo estuviera derritiendo.

La criatura no se quedo atrás pero Fred logró entrar a tiempo a su casa y bloquear la puerta con un librero, fue a la cocina donde tenía alcohol y una venda, uso ambas cosas para su herida y se recosto en un sillón que tenía cerca, pero... antes de que siquiera pudiera marcar a la policía, un estruendoso sonido se escuchó, la criatura se había colado por la ventana.

Fred inmediatamente se escondió detrás de aquel sofá y evitó que lo viera aquel demencial monstruo, cuando tuvo la oportunidad corrió hacia la mesa tomo un cuchillo y se lo intento clavar en el cráneo, acto seguido, un chorro de sangre salio desprendido y mancho la cara de Fred, pero esa sangre... era suya. La hoja del cuchillo se había partido en pedazos y no dejo ni un rasguño, en cambio, a Fred le enterró su cola en el pecho, Fred quedo en shock  para después caer rendido al suelo.

La criatura se encimo en el, clavo sus garras en sus costillas y para mala suerte de Fred, seguía consiente cuando inicio a comer y desmembrar su cuerpo sin piedad alguna, no quedo nada más que una parte de su cabeza, y de la criatura solo había un rastro de huellas de sangre que se dirigían hacia aquel parque

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