El diario de Leah Smith

Capítilo 2

Miércoles 21 de Mayo de 2038
- ¡¿Ella es tu madre?!- dijo Negan incrédulo.
La pregunta me pillo por sorpresa, no estaba segura de que contestar porque yo ya no la considero mi madre , pero si digo que no lo es por todo lo que ha pasado, creerán que soy débil, y intentarán herirme con cosas relacionadas con ella.
Todos estaban mirándome esperando mi respuesta
-Si- opte por decir, con una voz quebrada donde se reflejaba el temor y dolor que sufrí durante años.
-Aún estas a tiempo de cambiar de grupo- dijo el lider de Alexandria, que al parecer se llama Rick, o al menos así es como le ha llamado Negan antes.
-No- dije de repente pero rotundamente, está vez mi voz sonó autoritaria, sin símbolos de debilidad.

La gente me miraba incrédula por mi respuesta, pero fue algo que dije espontáneamente me salió solo. Me sujete el codo derecho con mi mano izquierda y empecé a apretar fuerte, lo hago siempre que estoy nerviosa es una manía que tengo.
- Es mejor que decidida no venir.
Ahora a quien miraban incrédulos era a ella.
-Aaah no se lo has contado no, tu grupo no sabe lo que hiciste.- dijo con tono burlón.
Empecé a apretar más fuerte mi codo me estaba poniendo muy nerviosa, aún no logro superar aquel día , a este paso empiezo a pensar que nunca lo haré.
-Ella me abandonó, me dejo encerrada en un comedor lleno de caminantes. Mientras yo le gritaba ayuda que me salvase ella se fue,

Note como todos los del grupo de Rick me miraban y juzgaban con la mirada. Em realidad todos menos uno. Ese uno era un hombre  de unos 40 años con el pelo un poco largo y que llevaba una ballesta.

No notaba mi brazo estaba apremiándomelo muy fuerte, estaba muy nerviosa, veía todo borroso y mal.
No lo soportaba más  las miradas de la gente , las palabras entre susurros. Ser juzgada sin conocer la historia. No lo aguantaba, no podía seguir allí.
Me giré y empecé a irme. Empecé a recordar todo lo sucedido aquel día no lo podía sacar de mi cabeza. Cuando me quería dar cuenta ya no sabía exactamente donde estaba pero me daba igual. Decidí sentarme al lado de un árbol, el pie que tenía mal me estaba matando, me dolía mucho.
Estuve un rato intentando relajarme pero era difícil. Ha sido un reencuentro complicado.
Estaba centrada en mis pensamientos y no note a un mordedor que se acercaba lentamente . Cuando me quería dar cuenta ya estaba demasiado cerca, tenía un palo bastante grande cerca con el cual podría matarlo,pero no se si quiero, si es lo que tendría que hacer tal vez tendría que dejar que me matase, tal vez así haría un favor a todos , tal vez la gente esa tenía razón y soy una psicopatía , tal vez tenían razón en todas las cosas malas que han dicho de mi.
Antes de poder reaccionar alguien se acercó y mató al mordedor.