-¿Y ahora qué?- dijo Ël, preocupado por la que acababa de pasar.
-¿Brbrbbrrrbrbbbrbrbrrbbbbr?- dijo Pastafari (que significa algo así como: pues no sé, yo eso lo tiraba, no tiene buena pinta. A partir de ahora lo traduciré directamente para ahorraros el arduo trabajo de tener que leer la transcripción de lo que Pastafari decía).
-Bueno, bueno, tranquilos- dijo Yo -no es para tanto ¿no...?
Esa cosa, el universo primitivo, era como una masa informe, cálida y brillante. Yo vio la belleza en dicha formación, la cogió y la estiro. Pasaron días, o quizás semanas (por aquel entonces el tiempo no existía así que es difícil saberlo con exactitud).
Para cuando hubo terminado, la energía había deformado la informidad de Yo, y comenzó a parecerse a lo que hoy llamamos seres humanos.
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Érase una vez el universo
Short Storyesto es una historia sobre la creación del universo y la teoría de la reencarnación áurea.