El hospital

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PERSONAJES:

Dante

Doctor

Julián

Enfermera

Paciente

                                                               Acto único

Los cristales crujen y los cuervos revolotean alrededor de las ventanas que rodean a la sala. El viento ruge como un monstruo y las nubes se cargan de negrura. En una sala de espera se encuentran cuatro sujetos extraños.

En el fondo del escenario se encuentran dos mesas de hierro oxidadas. Un viejo candelabro alumbra la lúgubre sala. Al frente del escenario se encuentra un viejo sillón impregnado de manchas.

Dante es alto con piel clara como la luna y unos ojos color miel. Porta un saco gris y unas botas negras. Dante toca la puerta desesperado.

Dante: ¡Que alguien me abra la puerta por el amor de Dios! (Da unos fuertes golpes a la puerta).

Doctor: (Abre la puerta). ¿¡Por qué carajos toca la puerta así de fuerte!?

Dante entra sin permiso a la sala.

Doctor: ¿Pero qué te pasa insensato? ¿Estás loco o qué?

Dante: (Jadeando) Le pido disculpas buen hombre pero unos locos me andaban

persiguiendo con macanas en la mano, listos para golpearme.

Doctor: Pues ¿qué es lo que hizo para que lo persiguieran?

Dante: No hay tiempo para explicaciones. ¿Me podría decir dónde estoy?

Doctor: Está usted en un hospital.

Dante: ¿Y usted es el doctor?

Doctor: En efecto, yo soy el doctor.

Dante: (Señala donde está la joven y los tres locos). ¿Y esas personas que están

allá?

Doctor: Ella es mi ayudante y los otros tres son mis pacientes.

Dante se queda ensimismado por la belleza de la mujer.

Doctor: ¿Quiere tomar asiento? (ofrece una silla a Dante).

Dante: (Sentándose) Se lo agradezco mucho doctor.

Doctor: No hay de qué. Con su permiso, iré a hacerles el chequeo diario a mis

pacientes. (El doctor se dirige a uno de sus pacientes).

En la sala reina un silencio momentáneo. Un paciente se le acerca a Dante.

Julián: ¿Cómo se llama?

Dante: Me llamo Dante ¿y usted?

Julián: En mi pueblo me decían el "Destripa gatos".

Dante se espanta al escuchar esto.

Julián: (Ríe). No se asuste, solo estaba bromeando. Mi nombre es Julián.

Dante: ¡Diablos! Casi me muero del susto.

Julián: (Ríe) No se asuste mi amigo, solo es una simple broma. Por cierto ¿viene a ver a algún familiar?

Dante: No, solo me refugié en este lugar.

Julián: ¿Acaso lo perseguía la policía?

Dante: No, no nada de eso. Eran unos pobres drogadictos o algo por el estilo.

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