Secret Show [U-KISS]

Capítulo 2

POV KEVIN
Luego de una ardua jornada de audición (dónde había tenido que estar en el recinto durante alrededor de ocho horas) dos semanas después me habían marcado para decirme que había obtenido el papel por el cual había audicionado. A decir verdad, no se me hizo tan complicado el actuar para el papel, sobre todo porque había leído hasta el cansancio el guión y realmente había analizado y sentido el personaje. Lo que en su momento me puso de nervios fue que, lejos de lo que había pensado, bastante gente fue a la audición para el mismo personaje que yo, lo cual se me hizo extraño sobre todo porque pocos le apostarían a la temática de la serie. Aún así más allá de eso y del tiempo de espera me sentí muy bien, sobre todo al actuar junto a Kim KiBum, uno de los actores que ya había sido confirmado para la serie y el cual hacía el papel de mi pareja durante el primer capítulo de la serie.

La verdad es que estaba contento de haber obtenido el papel, pues ésta era la oportunidad perfecta para mostrarle a la gente una verdad inevitable: que la homosexualidad también se encontraba en los grupos Idol, que en general había mucha diversidad sexual en el mundo del entretenimiento como en todo el mundo, que era parte de la vida cotidiana. Yo mismo había tenido un novio integrante de un reconocido grupo..  o al menos hasta hace un mes.

Aún podía recordar cuando conocí a James. A ambos nuestras agencias nos habían mandado a una escuela de inglés, pues a pesar de que yo manejaba un nivel medio de inglés, mi agencia quería que comenzara a trabajar en un canal dirigido al público internacional y poder en un futuro hacer promociones fuera de Asia. James, por su parte, había estudiado en Estados Unidos pero aún debía perfeccionar su inglés y una escuela era la manera más fácil de que pudiese practicarlo en Corea.

James, como parte de una banda, hablaba de la música con devoción y fue de esta manera en que nos encontramos, cuando en una clase que compartimos él habló de sus motivos por estar allí y cómo ello le permitiría hacer lo que más amaba que era la música y yo supe que había encontrado a mi alma gemela de la música. Comenzamos una amistad en la cual salíamos a comer después de nuestras clases (cuándo podíamos) y nos mensajeabamos en la noche con el pretexto de la tarea para terminar hablando de nuestros gustos e intereses o inclusive de temas sobrenaturales y de política. Era de esperarse que, un par de meses después, inciaramos una relación.

Mentiría si dijese que sufrí en aquella relación. Para mí eramos la pareja perfecta. Si bien en ocasiones no podíamos vernos debido a sus actividades o las mías, en el año y medio que duramos encontrábamos los espacios para poder vernos y divertirnos como adolescentes. James era simplemente perfecto, era dulce y todo un caballero que sabía perfectamente como mantenerme con una sonrisa en la cara. Inclusive llegué a pensar que había encontrado a mi compañero de por vida... o al menos hasta hace cuatro semanas.

Recuerdo que me encontraba en una televisora luego de la última presentación de mi comeback. Recuerdo que desde que había escuchado la canción supe que no iba a ser tan popular como los anteriores, no porque la canción fuese mala (porque la verdad la adoraba)  si no porque era un ritmo diferente a las canciones de moda del momento. Aún así terminé las promociones con todo mi ánimo y con la esperanza de que mi próximo comeback fuese más popular.

Estaba a punto de salir del camerino que me habían asignado cuando alguien tocó la puerta y James entró con naturalidad, pues no era extraño que me fuese a visitar durante mis promociones y viceversa.

-Hola- saludó con timidez y yo me acerqué a besarlo, pero él se apartó.

-¿Qué pasa? ¿Estás bien?- pregunté con preocupación.

-No, no lo estoy- suspiró y se sentó en el pequeño sillón de la habitación, indicándome que me sentara junto a él- Kevin hoy vengo a hacer algo que me rompe el corazón como no tienes una idea.