4

6.8K 629 734
                                    

El país más bajo se puso de puntillas, e intentó tapar los ojos de su acompañante. Cuando vio que no podía por su estatura, frunció el ceño.

Tápate los pinches ojos.

Okay, okay— Canadá rió y cerró sus ojos, no estaba entre sus planes abrirlos puesto que, si lo hacía no tendría su sorpresa, y otra razón eran los "madrazos" del mexicano.

Estuvieron caminando unos minutos, cuando llegaron a México le brillaron los ojos y se puso enfrente de Canadá, quitando con cuidado sus manos mientras lo veía con una sonrisa.

¡Sorpresa~!— alzó sus brazos entusiasmado, y sintió cómo lo cargaban en un abrazo.

Oh, so beatiful~!— Canadá lo bajó, miró a todos lados, y encontró la mirada de México, quien veía los pequeños insectos llamados "luciérnagas" volar alrededor del lugar.


(Arriba hay un dibujo de cómo se vería pero, tu imaginación es libre¿)

(XD q oso komo es q ahora ni un palo sé dibujar ^)

Sonrió con calidez y tomó con cuidado las manos del mexicano, quien lo miraba con una expresión nerviosa.

Mexique... I... No, yo...—tomó aire.

Pensó un poco las palabras, y después volvió a mirar al menor.

Te am--

Yo también.— rió un poco avergonzado, sentía su cuerpo temblar por la cercanía y cada segundo incrementaba la sensación de que sólo ellos dos existían.

Canadá entrelazó sus dedos con suavidad, mientras podía jurar escuchar el corazón de México y el suyo sincronizar sus latidos.

¿Quizá fue muy rápido? No sabía, pero ambos sentían la necesidad de estar junto al otro, de no querer separarse. Ese momento no podía acabar.

Wey, ya bésame.

El más alto soltó una pequeña risa, mientras tomaba las mejillas de su amado país y acercaba lentamente sus labios.

Ambos cerraron con inseguridad los ojos, y pasó; unieron sus labios.

Se unieron de una forma tan inocente, tan hermosa, que cualquiera que los viera moriría de ternura ahí mismo.

Duraron unos segundos quietos, y México comenzó a mover lentamente sus labios, cosa que Canadá imitó.

Su timidez no les dejaba hacer o decir más, simplemente querían disfrutar el momento y, cualquier cosa, podría romper la burbuja entre ellos dos.

El país más alto, pasó con delicadeza sus manos por la cintura de México, y duraron unos segundos más, para después separarse poco para tomar aire.

Besar a la pared no se compara con esto...— escuchó, y causó una pequeña risa en Canadá.

Let's go to your house— murmuró el de hoja de Maple con calma, México asintió nervioso y entrelazó una vez más sus dedos, caminando juntos. "¿Ya tan rápido? Ni un cafecito"

Durante el camino, estaban hablando de cualquier cosa que se les ocurría, en verdad los entretenía y, al no tener un tema de conversación fijo volaba su imaginación.

[🌹]

Gracias por traerme, eh... ¿Quieres pasar? Es que, ya es tarde y es peligroso por aquí...— jugó con sus dedos.

clavicles; canmex.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora