YASURA

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Manhattan, New York

Eran las 5:30 am aproximadamente, cuando sonó mi celular, era una llamada de Daniel el supervisor de él hospital mental en el que trabajaba

-Si?- Dije con toda la pereza del mundo

-Yasura? Estabas dormida?- Dijo mi superior con algo de burla en su voz

-Es sábado que esperabas?- Dije tratando de aclarar mi vista

-Lose, pero te dije que tenía algo urgente que contarte.... Y es sobre tu trabajo- Dijo el haciendo que mi curiosidad despertara

-De que se trata Daniel?-Dije con mucha intriga

-Mejor te cuento en persona es algo muy tentador... Te veo en el mismo café de siempre en una hora-

-Está bien, te veo haya- Dije despidiéndome y colgando la llamada –Que será eso tan importante que tendrá que decirme?- Esa pregunta no dejaba de rondar por mi cabeza, y no dejaría de hacerlo hasta saber que se traía Daniel.

Bueno me levante de mi cómoda cama para ir a ducharme, soy una psiquiatra de 21 años, bueno hoy cumplo los 21 pero es igual me gradué muy joven apenas llevo dos años trabajando para Daniel, pero él me ha tomado mucha confianza me ha dado la tarea de ser quien atienda a los pacientes más peligrosos o "dañados" mentalmente, es interesante saber sus historias y saber el por qué? De por qué están ahí encerrados, muchos son que sus familiares, otros son encerrados por la policía y otros por voluntad propia, es una variedad de cosas muy interesantes y a la ves perturbadoras me han tocado psicópatas y han intentado hacerme daño pero, este trabajo me encanta, me gusta ayudar a esas personas, es algo que traigo en la sangre o eso dicen.

Bueno al acabar de bañarme, me cepille mi largo cabello castaño y me puse cualquier cosa no le di importancia y arregle mi cabello con una trenza y con un poco de maquillaje y decidir salir de mi hogar para dirigirme a la cafetería donde vería a Daniel, al llegar el todavía no había llegado haci que decidí pedir un café negro nada especial, para mí era un día normal, no le daba importancia a mi cumpleaños ya que nunca fue... digamos bueno, pero cuando mire a Daniel acercarse con un pastel y un regalo supuse que no sería el cumpleaños tranquilo que yo esperaba

-HAPPY BIRTHDAY!!!- Dijo de un grito el joven trayendo hacia mí el pastel –Felicidades Yasura-

-....Muchas gracias, pero no tenías por qué hacer todo esto- Dije un poco apenada él no sabía lo que yo opinaba de mi cumpleaños

-Como que no? Claro que si el año pasado no me dijiste de tu cumpleaños y esta vez no deje que se me pasara-

-Si eso pude notar-

-Bueno, pide un deseo- Dijo con gran entusiasmo y aunque no estaba muy convencida de eso accedí a hacerlo –Que pediste?-

-No se dice, si se dice no se cumplirá- Dije riendo

-Tienes razón, oye y en Japón hay tradiciones de como festejar tu cumpleaños o cosas haci?-Dijo con gran intriga, él sabía que yo era de Japón y a mí me encantaba hablar de ese lugar haci que le respondí su pregunta

-De hecho, haya solo se festejaba el primer año de edad, cuando cumples 20 y al llegar a los 60-

-Y eso por qué?-

-Pues el primer año es por agradecer que cumpliste el primer año sano y en paz, los 20 es porque a esa edad haya ya eres adulto y hay una ceremonia llamada Seijinshiki, en esta celebración las mujeres utilizan sus mejores kimonos, que son vestiduras tradicionales y los hombre utilizan sus mejores trajes y suelen rezar para pedir sabiduría y conocimiento para su nueva vida como adultos y cuando cumples 60 hay otra celebración llamada Kanreki que significa literalmente "volver", porque los japoneses creen que se vuelve a nacer, al llegar al Kanreki siempre se regala un sombrero y una chaqueta de color rojo, porque según las creencias tradicionales este color ahuyenta a los malos espíritus.-

-De verdad solo celebran esos años?-

-Bueno eso era antes y solo algunas familias lo conservan, en mi orfanato no lo hacían, nosotros siempre queríamos fiesta y pretexto para comer pastel-

-Viviste en un orfanato?- Dijo con algo de tristeza, había olvidado que no le conté esa parte de mi vida

-Sí, viví ahí desde que tenía... como 6 meses de vida... oh eso me dijo mi padre adoptivo- Dije tomando un poco de café

-Y a qué edad te adoptaron?- Dijo Daniel con un poco de curiosidad

-Fui adoptada a los 5 años... la verdad no recuerdo bien esa etapa de mi vida, pero mi padre dijo que cuando me adopto vio que me despedía de una niña, dice que era muy parecida a mí, yo creo que se equivocó le digo que yo no recuerdo a nadie de ese lugar-

-Porque nunca me contaste de esto?- Dijo el con un tono de reclamo en su voz

-No lo sé, no llevo mucho aquí y como que contarle a un desconocido de mi vida personal.... Mmm no se hubiera sido algo raro no lo crees?-

-Bueno.... Si tienes razón-

-.... Pero... me trajiste aquí para decirme algo importante que no?- Dije recordando porque había venido

-Ahh... si tienes razón... bueno tal vez esto te sorprenda... pero.... Te acaban de transferir- Dijo con una sonrisa en su rostro

-¿Que!?.... ¿Porque!!?- Dije enojada- ¿Que no hago un buen trabajo!!? ¿O es porque no soy estadounidense?-

-No, nada de eso... nosotros estamos encantados con tu trabajo... La forma en que a cada paciente le prestas una atención diferente es admirable.... Pero-

-¿Pero?... Demonios!!! Porque siempre tiene que haber un "Pero"?-

-Déjame terminar Yasura... Como te decía, tú has de saber que hay varios hospitales mentales que son del mismo dueño, cierto?- Me pregunto, a lo que yo asentí para que supiera que entendía de lo que hablaba- Bueno, pues al dueño le ofrecieron un hospital mental, el cual es al que te van a transferir... Pero ese nuevo hospital se encuentra en Tokio, Japón-Dijo Daniel muy lentamente, como para asegurarse de que entendía todo lo que él me había dicho

-Espera... eso quiere decir que, regresare a Japón?- Pregunte para confirmar, si era correcto lo que había entendido

-Exacto... Regresaras a Japón- Dijo con mucha alegría

-Se cuánto quieres esto y... quise traerte un regalo, para que no me... nos olvides- dijo entregándome una bolsa

-Sabes que nunca te olvidaría- dije tomando la bolsa de regalo y observando que tenía en el interior- awww que hermoso- Era un osito de peluche con una camisa de fuerza y una cajita que contenía un collar de medio corazon rosado, detrás tenía escrito el nombre Daniel Henderson, el nombre completo de Daniel

-Sí y mira- Dijo mostrándome su llavero, en el cual llevaba la otra mitad del corazon y tambien mi nombre completo Yasura Kinomoto W.

-Gracias por esto- Dije con una gran sonrisa,

-No tienes que agradecer, te lo mereces eres una gran doctora y estoy agradecido por haber trabajado con tigo y que hayamos podido ser amigos- Dijo sonriendo y tomándome de la mano

Había sido muy agradable estar ahí, no solo estuve en Manhattan si no también estuve en Tennessee, Los Ángeles, Nuevo México, Washington D.C y muchos otros lugares de estados unidos y a donde iba era todo increíble me divertía mucho y conocer nuevos lugares era, no sé cómo explicarlo, era genial, ame cada día que estuve en esta ciudad, convivir con compañeros increíbles, hacer lo que me gusta ayudar a la gente y pues tener al mejor jefe del mundo, no me pudo haber ido mejor aquí, pero también extrañaba Japón y por supuesto a mi padre, hablábamos mucho y todo pero no era lo mismo de estar con él y abrasarlo, verlo tomar el café en las mañanas leyendo su periódico, o almorzar juntos, extrañaba todo eso y ya era hora de volver.


El Reflejo de la menteWhere stories live. Discover now