Un día haristo caminaba por los caminos de su pueblo natal cuando vio un pergamino tirado en una fuente de su pueblo, al ver esto haristo lo agarro y no lo pensó y lo abrió, al abrirlo vio una imagen de una mujer con ojos verdes y una corona que era muy parecida a él. Haristo cerró el pergamino y fue corriendo a donde su padre, al venir le dijo:
-Padre, mira- dijo haristo
-que pasa hijo no ves que estoy... De donde sacaste eso? - dijo el padre.
-Lo encontre tirado en una fuente dijo haristo.
-devuelvelo inmediatamente- dijo el padre
Haristo decepcionado y triste fue a dejar el pergamino como dijo el padre.
Al llegar haristo lo pensó 2 veces y no hizo lo que su padre le dijo que hiciera,llego a su casa y rápidamente entró a su cuarto, guardo el pergamino debajo de su cama y fue a comer.
Al llegar a la mesa el padre le dijo:
-perdoname al hablarte así como lo hice al enseñarme eso- dijo su padre
-no te preocupes, pero me pudieras contar quien era esa mujer? - contestó
Haristo.
-no te diré quien es, aún no es el tiempo- dijo su padre
-pero si estoy preparado, ya soy mayor, tengo que saber la verdad sobre mi familia.
-por favor, ya no hablemos de eso. - dijo el papá.
-ok está bien- dijo haristo. (pero no se quedaría con la duda, así que fue a visitar a personas o deidades que le fueran a ayudar. Esas deidades eran las hermanas del destino
