.7.

14 3 0
                                    

Capitulo 7

Tras luego ver desaparecer a Ladies, seguí con mi labor de vigilar el sueño. Estuve caminando por todo lugar hasta que note, la presencia de un aura negra cual empezaba a cubrir todo a lo que rápidamente tome el broche pero a lo que me acercaba de la nada aquella pequeña aura, era un gran monstruo cual creado era por una gran sombra. Quedándome petrificada por lo que veía sin poder reaccionar me tomo por la cintura lanzándome lo mas lejos de él, a lo que rápidamente me recordé lo que había dicho Ladies sobre el broche a lo que pensé rápidamente en un arma para defenderme a lo que el broche se convirtió en una espada mágica de color azul esmeralda, sosteniéndola en mi mano derecha con fuera a lo que mientras con la otra lance una esfera mágica cual me tele-transportó lo más cercano hacia el monstruo. Por lo que tome la espada y salte con una gran fuerza incrustándole en el pecho la espada, escuchándose de fondo un gran aullido de dolor desapareciéndose como niebla negra a lo que salto hacia atrás, cayendo de pie...

—¡Nunca me había sentido, Tan viva! —Grite eufórica por tal momento, sentía la adrenalina en mi sangre, ¡Qué gran sensación!—. Creo que mi trabajo está hecho —Agregue mientras palmeaba mis manos a lo que la espada volvía a la forma original del broche a lo que eh chasqueado mis dedos, rodeándome con un leve brillo dorado a mi alrededor...

Jack's PVO:

Habían pasado horas que Elsa se adentro en el sueño de Jeime. Hace poco se había visto un aura negra alrededor de el sueño del él, pero de la nada volvió a su estado normal excepto que un brillo azulado. Espero que no haya tenido problemas, ¿debería de hacer algo?...No, de seguro ya lo resolvió ¡Ah! ¿Qué me pasa? , antes no me preocupaba por alguien, al menos que

—¿Me gusta Elsa? —Murmure bajo sintiendo cómo mis mejillas se teñían de un color carmesí, que ¡estoy pensando!, mejor vigilo a Jeime a lo que me acerco a él, note que al lado de su cama aparecía un brillo dorado cuál de este envolvía a alguien, a lo que sin más desapareció aquel brillo dejando ver a Elsa a lo que rápidamente me aleje un poco algo nervioso

—Regrese —Canturrio ella

—¿Eh? Sí, que bueno que regresaste... Pensé que te había pasado algo

—¿Por qué pensaste eso? ¿Cuánto tiempo estuve allí?

—Creo que casi 1 hora

—¿Enserio?, El tiempo paso rápido

—¿Y cómo te fue?

—Estuvo genial —Contesto vivazmente

—Que bien, ¿Te parece que váyanos a la guarida?

—De acuerdo...

Jelsa: La Chica de los SueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora