Querida Agnes:
Admes, curioso y distante, adolescente discreto, tímido con las chicas, bajito, de ojos verdes, guapo para algunas, feo para otras. Solo nuevo, nuevo en un centro que no conocía, público, no muy grande; pero en definitiva.... nuevo. Qué sentir, qué sentíamos; puedo expresarlo yo con esta bella redacción a modo de biografía.
Amor, Admes, quería sentirlo, experimentarlo. Surge de la raíz de la planta, del nacimiento de la semilla; de la soledad. Intrínsecamente de esta y de su más fiel aliada, la discreción. En su caso, dada en función de la novedad, de lo nuevo, o, más bien, del nuevo. Curiosa evolución la suya es y curioso el olvido de esa novedad.
Cuestión, como casi todo lo vivido, de tiempo. Tal vez la discreción en estos casos sea la mejor aliada, pero es compleja, enrevesada, no del gusto de todos(no es sencilla ni rápida). Podríamos hablar aquí, que no lo haremos, de todo ese tiempo, de cómo Admes, duramente, vio resultados, si no de uno en concreto.
Fue una cuestión realmente espontánea. Su explicación en sí(ésto no negando una reflexión sobre el acontecimiento) no tiene un sentido claro, mas se encuentra difusa la cuestión de si Admes y Agnes, desean que sea difusa. Cinco de Enero, donde debería haber terminado cierta carta, pero no lo hizo. Abandoné, yo, el autor de dicha prosa, este marco no por otra cuestión que no haya sido la simpleza, el pasar, hasta los celos; pero aquí cerraremos un escrito que debería de haber finalizado meses atrás; tras largo recorrido desde un cinco de enero del año anterior.
Desde Navidad, empezó, no como lo que acabo o acabará siendo, se dio pie a una relación más allá de la chica guapa, popular y de carácter ingrato que sin ningún motivo se mete con uno en mates... En estos años de penuria psicológica por parte de los padres y alumnos podría ser considerado bullying. Luego Admes se encariñó y Agnes también, felicitando a esta de una esbelta forma ese año por su cumpleaños. Esta era chica curiosa, de carácter complicado, uno debía ir con pausa (la historia de la chica hacia el chico no me corresponde a mi contarla), pero ante todo dudando, de uno mismo y de ella. Lo peor que le podría pasar a Admes era idealizarla, hubiese perdido su esencia. Tras esta temporada la relación establecida era de un amor/odio intencionado, divertido al principio, hasta que con el tiempo los dos pasan a ser inseparables, cosa rara para Admes, pero entonces fue cuando a él tras mucho tiempo le empezó a cansar esta relación.
El tiempo les hizo, o ellos hicieron al tiempo a su favor. La cuestión no recaía en que fuese repentino, raro para los dos y para el resto de sujetos que presenciaban asombrados las operaciones que tan bellos seres ejecutaban entre ellos, sino que se querían y poco a poco cada vez más, la confianza ganada por Admes hacia ella era realmente curiosa. No era necesario una relación de pareja, no en aquel momento ni mucho menos, habría que ver si los dos hubiesen estado dispuestos; ya que iba más allá, y ninguno quería que nunca se acabase. Nadie negará lo innegable, realmente Admes la quería y tal vez a ojos de todos hubiese querido estar con ella ,y, a veces, de los suyos propios; pero las excusas, las buenas excusas lo frenaban, que eran: el olvido, la finitud de las relaciones, y eso cuando quieres de la forma más pura concebida por los hombres, trasciende. Así que la evolución fue favorable, grata y muy bonita; pero cansino a veces el uso del recurso del amor/odio. Era una forma de ampliar las conversaciones, de hacerlas divertidas, hasta que te preguntas por qué. Si realmente es necesaria una relación así; porque ninguno se odiaba, si no que se querían y mucho. La materia pasó a ser forma, algo más que dos personas en el espacio tiempo, otra sustancia no dada hasta ese momento exacto, en palabras de Agnes "y es que cuando estoy con gente noto que no encajo porque solo hacen tonterías o hablan de tonterías y encima me juzgan a mí como si yo por ser diferente a ellos fuese menos,[...]si alguien no sabe valorarte el problema es suyo porque tú no haces nada malo y tienes una personalidad envidiable, así que no, no vas a ser mejor siendo normal ni vas a estar mejor, sé tú mismo y ya está porque tienes amigos de sobra y gente que te quiere tal cual eres." Cuando el que la admiraba era él a ella, tenía algo, algo que a Admes se le escapaba pero eso le encantaba a la vez. En tanto que idealizas a una persona la consideras perfecta o similar a algo así, este no era el caso, para ninguno. La cosa es que se le escapaba y se le sigue escapando aún hoy. Quién es realmente Agnes, tal vez junto con otra persona Admes fuese quién más supiese acerca de esto, pero la duda le corroía y le corroe hoy. Cómo es realmente Agnes, qué máscara usa con Admes, o si realmente no necesita máscara con él. Eso es lo que le corrompe, su necesidad de evitar el cariño(nunca se han dado ni dos besos) pero a la vez desearlo, los dos; de moverse solos en la manada, pero también querer juntarse entre ellos y si así es por qué no lo disfrutan en su plenitud ninguno de los dos. Por qué a Admes le pueden decir "es impresionante lo que te quiere Agnes" cuando él a veces no se da cuenta o no lo valora, dándose también esto recíprocamente. Tal vez ese juego deba acabar. Porque no solo sé que no sé nada, sé que él la quiere y ella le quiere y de ese "amor" surgen estas líneas que sustituyen cualquier tipo de felicitación. Bellas, limpias, sinceras.
Admes Fernández Medio.
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Querida Agnes
Romance"Juventud que no se arriesga, sangre que no se derrama, ni es sangre , ni es juventud." Miguel Hernández