En mis destellos de ignorancia yacían mis más anhelados pero reservados sentimientos que suplicaban por una salida.
Como un disparo quebrantó mi frágil orgullo el que fue mi amada compañía por los últimos años.
Si acaso conocía los límites que me exijía ahora los desconozco, sustituidos por un hormigueo que con dificultad diviso.
Nueva jerarquía se impuso en el altar de mi capilla, dando lugar a tan innumerables razones para expresar mi inegable sentimiento.
¡Oh criatura preciosa!
Me encuentro encantada con tan esplendorosas virtudes que brillan en tu presencia.Las horas no son suficientes para dedicartelas, la ansiedad de ti me sumerje en un desierto de posibilidades, el recuerdo de tus caricias me mantienen en un columpio de emociones y nuevas formas de explorar trópicos cálidos que poseo.
¡Cariño y es que eso solo es una infinitésima parte de quererte a tí!.