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‛Capítulo uno‚

Dipper salió de la cabaña del Misterio con su mochila –donde traía consigo; un diario donde tenía un número dos en la portada– aquel diario se lo compró a un ser sobrenatural quien era como una persona solo que en todo su cuerpo pasaban todas cosas que sucedían en Gravity Falls, extraño pensaran algunas personas, todo comenzó cuando iba caminando hacia más adentro del bosque, cuando se percató de un camino de luces, las cuáles lo llevaron hasta una cueva, donde apareció aquel ser.

“Qué bueno que no decidiste correr por ayuda, niño” habló, pero su voz salió distorsionada, algo que pudo con algo de dificultad entender.

“No se quien eres, pero habla” soltó firme, sin miedo por que vamos era Dipper Pines, un chico que no le temía a nada –según el– Por que todos tenemos miedo, ¿verdad? “Habla, ¿Que quieres?

“Quisieras saber más de los secretos de este pueblo? Por que yo te puedo dar algo que puede servirte demasiado, ¿aceptas? ” acercó su mano, a la cuál le salieron algunas llamas color rojo.

Dipper ladeó su cabeza confundido con el ceño fruncido.

“¿Qué eres? ¿Por que quieres que acepté aquello? ” retrocedió.

“Esto te beneficiará demasiado, ¿aceptas? Vamos, o acaso el gran ¡Dipper Pines! ¿Tiene miedo? ” Sonó burlón, Dipper se cruzó de brazos.

“Claro que no, pero primero pienso lo que voy a hacer, te hice preguntas, ¿Por que no mejor respondes? ” se sentó en el troncó de madera que estaba detrás de el.

“Interesante... El demonio si que escogió perfectamente bien” hablo por lo bajo, Dipper lo escuchó y lo miro con una cara sin alguna expresión “Vengo por parte de alguien, que en el futuro será alguien especial que no querrás dejar, solo tu puedes verme nadie más lo puedo hacer, y bueno la otra pregunta ya creo haberla dicho, ¿Así que? ”

Dipper miro hacia el suelo ¿Alguien especial? El no tenía ninguna persona que fuera especial, jamás le había tenido algún cariño a las personas que se llamaban «su familia» a nadie.

“Tal vez te equivocas ” lo miró. “Jamas tendré a alguien que pueda ser especial, pero me interesa saber sobre los secretos eso es cierto, y bien, solo juntamos las manos, y me das lo que sea que vaya a ser?”

“Así es, Dipper Pines, aceptas mi trató el cual se basa en darte los secretos de este pueblo, mientras que tu crearás el fin de toda la humanidad junto a ese alguien que sera especial? ”

“Loco, acepto.” juntaron sus manos, donde fue saliendo una luz que hizo que cerrará los ojos, al abrirlos poco a poco acostumbrándose a la luz otra vez, pudo ver una caja de metal cerrada. Miro al ser raro que estaba acostado en un árbol. “Y esto? ¡Donde están los secretos del pueblo!? ”

“Tranquilo niño, esa caja puede ser abierta con una llave que tienes colgando en tu cuello, ¿no sientes? ” carcajeó.

Dipper se miró y la pudo ver, se la quitó y alineó la llave en aquel espacio donde debía ser insertada, al abrirse salio polvo, tosió y saco el libro que había dentro.

“Un libro? Y esto en que ayuda? ” Al mirar donde había visto al ser raro, ya no había nadie, solo estaba el, soltó un bufido y se llevó el libro hasta llegar a la cabaña del misterio, donde lo recibió la única persona que era amable con el. Su amigo y empleado de la cabaña, Soos.

“Hey Dipper torpe! Haces mi tarea, las cosas están ya en tu habitación, lo haces o le diré a nuestros padres ” llegó su fastidiosa hermana, Mabel quien venia con sus amigas.

“Por más que quieras lucirte con ellas no podrás tonta” rodó los ojos y camino hasta su habitación donde por lo bajo se escucho un grito de su hermana. Así era la relación que tenía con ella, odio.