El Psicópata (suga y tu)[adaptada]

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Me puse de pie y busque en los cajones de la habitación a un lado de la sala. Encontré las cosas que necesitaba, pero debía darme prisa si quería que Suga siguiera vivo. Si, así de grave era su herida; Mortal.

Me acerque, prepare una inyección para aliviar el dolor. Cuando voltee para inyectar a Suga lo vi sosteniendo un cuchillo a lo alto, *De donde saco ese cuchillo?* Pensé. Cerca de mí, a punto de clavarme ese cuchillo en la espalda. Yo ya sabía que quería matarme, y esta vez el Suga tierno y amigable que yo conozco no estaba ahí.

Atrás de mí estaba un psicópata, tratando de matarme. De un manotazo tire el cuchillo. Él se desplomo en el piso, lo arrastre para recargarlo contra la pared. Trato de tomar el cuchillo. Pero yo lo aleje mas.

Lo inyecte. Y vi una expresión de alivio en su rostro, sabía que aún le dolía la herida, pero estaba segura de que ya no le dolía tanto como antes, tenía que actuar rápido, la herida era muy grande, Suga estaba perdiendo mucha sangre. Suspire y empecé a curarlo, el me daba manotazos y me impedía curarlo, pero estaba débil, así que difícilmente seguí intentando curarlo, me di prisa lo mas rápido que pude, pero los bruscos movimientos de Suga, su actitud negativa ante mi ayuda y el hecho de que una de mis manos no ayudaba mucho provoco que me tardara más de lo esperado. Por un momento creí que no sería lo suficiente rápida y que Suga moriría. Eso me puso triste. Unas cuantas lágrimas cayeron sobre mi rostro, pero ese no era el momento para llorar, limpie bruscamente mis lágrimas y seguí intentando curar la herida.

Después de unos minutos logre que mejorar y después de otros minutos logre que la herida fuera "buena" y así me asegure y me repetí a mí misma que no había ninguna posibilidad de que Suga muriera después de cómo había curado la herida yo. Levante un poco mas su remera y le puse una venda alrededor del estómago. Suga seguía moviéndose y fue difícil de ponerle la venda. Tome un algodón y empecé a desinfectar unos pequeños rasguños que le habían quedado ahí. Limpie la sangre que estaba en su abdomen y manos. Le tuve que quitar la remera para poder limpiarlo. Cuando estaba terminando él me dijo...