Inter Deos Nobis.

CATA CENERE II.

Después de haber conseguido convencer a Hades de la idea de tener hijos el inframundo cambio, el ambiente se llenó un poco más de color y Hades no podría ser peor padre, todo se le salía de las manos pero al fin y al cabo los quería... y Cata bueno, se fue forzada a alejarse un poco de esa familia, además de que no le encantaban los niños, no podía mostrarles lo crudo del inframundo.

Esto provocó una soledad inmensa, rara vez visitaba a los niños por estar todo el día en el trabajo... todos los días eran lo mismo, hasta que un día se hartó de esto, adoraba a esos niños pero el hecho de que Hades se centrara tanto en esto le fastidiaba la vida.

Cata en un golpe de desesperación fue a hablar con Hades de lo mal que estaba

-¡Es en serio Cata!- grito Hades golpeando la mesa

-¡Si, hablo en serio todos los días es lo mismo por estar haciendo tu puto trabajo!- grito Cata entre lagrimas

-¡Y cuál es tu plan que me deshaga de ellos!- contesto mientras caminaba por el costado de la mesa

-¡NO CLARO QUE NO!... sabes que adoro a esos niños... solo... no sabes lo sola que eh estado, antes eras mi única compañía y ahora solo puedo hablar con almas en pena y a con los soldados que no tienen ni un gramo de cerebro, y rara vez puedo estar con Cristofer y Renna- contesto cata sentándose en un sillón mientras tapa su rostro en lagrimas

-Entonces que quieres que haga- contesto tomándola del hombro

-Ya te dije... déjame ir al mundo humano una semana... solo te pido una semana- dijo mirándolo fijamente

-Sabes que no puedo hacer eso- contesto mientras se alejaba

-Por favor Hades... solo es una semana, la armada está más que entrenada, no ha sucedido ningún accidente en más de un mes, y ya sé cómo salir, solo le tienes que decir a Cerbero que me deje pasar- dijo mientras se acercaba a Hades y tomaba su mano

-Cata... no insistas- contesto mientras soltaba su mano

-¿Es en serio?, después de todo lo que eh hecho por ti ¿no me vas a dejar hacerlo?- reclamo entre lagrimas

-Lo siento- dijo terminando la conversación mientras tomaba unos papeles de la mesa

-TE ODIO- grito cata mientras corría entre lagrimas

Cata comenzó a caminar por la ciudad sin poder contener las lágrimas mientras susurraba cientos de cosas por toda la noche

-Que le cuesta

-No pasara nada si me desaparezco unos días

-HIJO DE PUTA

-Si supiera lo que es estar en mi lugar, él tiene hijos que lo acompañan

-¿Es mucho pedir?

Y así paso toda la noche, caminando por toda la ciudad hasta llegar a su casa, agotada, deprimida, rechazada, Cata se recostó en su cama mientras miraba al techo aun entre lágrimas hasta que se quedó dormida, al siguiente día, un fuerte golpe en la puerta la despertó y con dificultad se levantó de la cama dirigiéndose a atender la puerta.

-CATA SE QUE ESTAS AHÍ- se escuchó una voz que reconoció al momento

-Hades...- susurro sin abrir

-CATA YA ES MEDIO DIA Y LOS COMANDANTES ME RECLAMAN QUE NO TE PRESENTASTE- grito mientras seguía golpeando la puerta

-Lárgate- respondió Cata sin abrir la puerta

-Cata, sé que estas enojada por lo de ayer pero tienes responsabilidades que cubrir no puedes portarte como una niña- contesto Hades con un tono de fastidio