Capítulo 1

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Oscuridad. Era lo único que entraba por la ventana de la cabaña. Eran más o menos las 3:46 de la mañana, pero no tenía sueño. Además, los ruidos de la naturaleza no me ayudaban a conciliarlo.

¿Sigue siendo correcto que me aísle de toda la gente?
Siempre me he preguntado lo mismo, pero nunca he sabido responder.
Puede que en verdad mi sitio esté aquí en el bosque, sin nadie que me moleste.
Pero hay veces que necesito hablar con gente.

En ese instante me quedé dormido. Desperté de repente cuando escuché algo llamando a mi puerta.
¿Qué podía ser?¿Un animal? No lo creo, ya que un animal no podía dar esos golpes tan fuertes. ¿Una persona? Imposible. No solía haber nadie en kilómetros a la redonda.
Decidí averiguarlo acercándome sigilosamente a la ventana de al lado de la puerta, aunque eso podía significar que me descubriese lo que fuera que estaba llamando. Tentando a la suerte, miré disimuladamente.

No me lo puedo creer.

Abrí la puerta hecho una furia y contesté de mala gana.
-¿Se puede saber qué hacéis aquí?
- Hemos venido a pedirte de nuevo que te unas al ejército espartano. Tus habilidades de combate son excelentes y no pueden ser pasadas por alto.

Hace dos años vinieron las mismas personas a mi cabaña. Querían que me unirse al ejército espartano, pero yo no estaba interesado. Parece ser que quieren hacer mi vida imposible.

- Ya os he dicho que no me interesa lo más mínimo. Ahora marchaos y no volváis a molestarme. - dije irritado y les cerré la puerta sin esperar respuesta alguna.
Pero uno de ellos se antepuso y colocó su pie entre la puerta y la pared de mi cabaña para que no se cerrase.
-No es una oferta, es una orden. Directamente de nuestro emperador Konan, Señor de Elian.
- ¿Y que pasa si rechazo la orden?- Dije retando al soldado, que no tenía pinta de ser muy amable.
- Entonces pasarás el resto de tu vida siendo torturado hasta que aceptes la orden. Estamos en proceso de guerra, Orión. No podemos andarnos con tonterías y aceptar en el ejercito a cualquiera para que muera en la guerra. Necesitamos a los más valientes, los más fuertes, los más hábiles y a los más astutos. Y tu posees todas esas cualidades. Eres especial Orión y por eso te necesitamos entre nuestras filas.                                                                     
 -Si de verdad me quiere el emperador en su ejército decidle de mi parte que venga él mismo a pedírmelo. Hasta entonces no me pensaré realmente vuestra petición.               
-Eso no es posible Orión, sería poner en peligro al sumo emperador. Y no nos lo podemos permitir.     

-Pues entonces no volváis por aquí. No quiero veros.

De una patada, quité el pie del hombre y conseguí cerrar la puerta. Se quedaron un rato hablando tras la puerta, pero no les hice caso. Tras un rato, se fueron por donde habían venido.

¿Por qué se empeñaban tanto en querer reclutarme si saben muy bien que los voy a rechazar?
Finalmente, me dispuse a salir a cazar. Necesitaba despejarme.

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Sigilo. No podía permitirme mover ni un solo músculo si no quería que aquel enorme ciervo se escapase. Puede que éste animal sea lo único con lo que pueda comer estos días. Los hombres de esta mañana seguirán rondando por aquí y no podré salir a cazar con ellos cerca.

Deslicé la mano suavemente hasta mi carcaj y saqué una flecha.
Coloqué la fecha en el arco de manera que apuntase a la cabeza, apunté.... Y disparé.

Me acerqué para comprobar que el animal estaba muerto, y efectivamente lo estaba.
Rápidamente lo cogí y cargué con él hasta llegar a casa.

Cuando llegué, dejé al inerte animal al lado de la puerta y puse el caldero para poder asarlo.

Estaba terminando de calentar el caldo de acompañamiento cuando escuché un ruido parecido a un ladrido.
Paré de cocinar y salí a la puerta de la cabaña para averiguar de dónde venía aquel sonido.
Me sorprendí de ver que era una cría de Border Collie.  

Era bastante adorable

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Era bastante adorable. Me pregunto por qué estaría aquí, pero el pequeño perro no paraba de ladrar. Creo que tendría hambre. Miré en la cabaña algo que pudiese darle, pero nunca había tenido mascota y no tenía alimento para ellos. 

Sin previo aviso, el diminuto animal entró en la cabaña y se acostó en mi cama. En un rato se quedó dormido.

Decidí no despertarlo. Parecía que estaba agotado. Mientras dormía, miré si tenía collar, pero no tenía nada.
-Debe ser callejero- pensé.  
El único problema es que no podía asimilar que una cría de perro tan adorable como éste no hubiera sido acogido ya.
No sé si quedármelo o no. Si me lo quedo podría enseñarle a cazar y podría ayudarme. Tras un rato de pensar, decidí que no era mala idea quedarme con aquel perrito.              

Primero tendría que conseguir alimento para él.
Salí a la ciudad más cercana que tenía, no sin llevar una capa con capucha conmigo. No podía dejar que la gente me reconociese, porque la noticia de que me querían para el ejército espartano circuló con mucha rapidez y ahora todo el mundo sabe de mi existencia.

Entré a una tienda de productos para animales bastante antigua. Este local lleva abierto desde antes de la guerra. Antes era espléndido, super limpio con un montón de estantes con diferentes productos para animales. Ahora sólo es un montón de polvo, con la mayoría de las estanterías vacías y sin nadie que viniese aquí para comprar.

Divisé una estantería en la que ponía: comida para perros.
Supongo que será eso.
Me llevé la única bolsa que había y me dirigí a la caja para pagar.
La mujer que me atendió se me quedó mirando un rato, creo que me estaba identificando con los rumores. Rápidamente apartó la mirada, intimidada. Pagué la comida y regresé a la cabaña.

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Cuando llegué a la cabaña, el cachorro seguía dormido. Debió de haber caminado mucho. Abrí la bolsa con la comida y la eché en un plato que no usaba desde hace mucho.
La dejé al lado de la cama donde el perro dormía por si despertaba, que pudiese comer. Yo fui al baño a darme una rápida ducha para comer el ciervo. Había sido un día intenso.
                                                                                                           

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⏰ Última actualización: May 22, 2019 ⏰

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