S i h y e o n;;

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Arrancar, quitar el tallo, sacar de a uno los pétalos, así estuve un buen rato juntando pétalos para llevarle a mí nona.


Una brisa golpea mi rostro haciendo que mí cabello baile en el viento, el clima realmente es increíble hoy; Soleado, pero no del todo cálido, hay momentos donde sientes el viento y el frío, “Otoño” ha llegado a Corea.


Me levantó del pasto decidida a volver a mí hogar, agarró mí canasta donde se encuentran infinidad de cosas naturales, que he recolectado hoy, mí nona estará feliz por lo que llevaré.


Todo el paisaje me parecía lindo y cómodo, ¿Es normal eso?, Ver todo color se rosas. Si hay algo qué me llama la atención son los trenes y las vías, ¿Por qué?, no lo sé aún, Aunque tal vez sea por qué siempre me prohibieron acercarme a ellos, según dicen: “Esos lugares son muy peligrosos”, y si , lo eran, sobre todo por qué no habían rejas o alguna cerca de madera, ya que eran muy comunes en el campo.


Tratando de rodear las vías del tren, mí vista se posa sobre una anciana, “Qué bella” pienso, algo en su comportamiento llama mí atención; Parece alterada, cómo si estuviese esperando a alguien o algo, tiene los ojos rojos y sus manos tiemblan.


Dudó si acercarme o no, pero finalmente me acercó, seguramente sí mí nona me viera al costado de las vías del tren, posiblemente me gane un castigó y eso implica “No más flores ni plantas”, aunque no deba acercarme mí curiosidad es más grande que cualquier otra cosa.


–Discu-disculpe señora, ¿Usted se encuentra bien?– digo tocando se hombre suavemente, ella se sobresalta ante mí tacto y puedo ver la tristeza que transmiten sus ojos. Ella se queda callada unos minutos, que ha decir verdad parecieron horas, pero al final termina hablando.


–Si querida, descuida.– Su mirada se dirige a lo largo de las vías, no entendía por qué ella estaba casi en el borde, tampoco entendía que hacía Yo también ahí.


–Debería correrse de el borde, mí nona dice que es peligroso– esbozó una sonrisa sincera, mientras trató de correr a la anciana que al parecer se niega rotundamente a hacerme caso.


–Estoy esperando algo niña, mejor vete está oscureciendo y tu abuela se preocupara por ti..– las últimas palabras las pronuncia casi en un susurro inaudible, pero claramente las escuché, y si tenía razón la anciana, mí nona debe estar preocupada pero, ¿A quién espera la señora? ¿Debería quedarme hasta que la persona llegué a por ella?.


–Tiene razón, pero cuando le diga el motivó de mí tardanza, no pasará nada, me quedaré aquí con usted esperando a que venga la persona que espera– ella me mirá con impaciencia y ternura, la veo alejarse un poco de mí, pasó en alto aquel gestó y le enseñó mí canasta.


–Mire señora..


–Nelida.


–Yo soy Sihyeon– digo, ella asiente con una sonrisa forzada.

Everglow; One Shot'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora