EN LOS JARDINES DEL PALACIO
- ¡HABRÁ PENA DE MUERTE PARA TODOS AQUELLOS QUE SEPAN EL NOMBRE DE LA EXTRANJERA NO LO DIGAN! - grito Lena a los guardias que se disponían a salir en busca de respuestas.
Los guardias, como decreto real dieron información al poblado, nadie debía dormir hasta saber la identidad de la princesa misteriosa, mientras la joven extranjera, apoyada en un pilar del palacio observaba a todo el mundo correr de lado a lado, inspirando profundo empezó a cantar
¡Que nadie duerma!
¡Que nadie duerma!
¡Tú también, princesa,
en tu fría estancia
miras las estrellas que tiemblan
de amor y de esperanza!
¡Más mi misterio
se encierra en mí,
mi nombre nadie sabrá!
¡No, no, sobre tu boca lo diré,
cuando resplandezca la luz!
¡Mi beso deshará
el silencio que te hace mía!
Terminando de entonar los últimos versos, dio la vuelta para ir al encuentro de los tres ministros.
-mi señora, por favor, reconsidérelo, retráctese y nosotros le daremos riquezas, y cuanta mujer pueda desear- dijo uno de los ministros.
-no, ya lo he decidido, y mantendré mi palabra-
La puerta del salón se abre, los guardias han capturado a su padre y a la joven esclava-la misteriosa princesa se muestra sorprendida y enfadada por la poca delicadeza de los guardias, al instante, la princesa Lena llega flanqueada por otro de los ministros
- ¡si ustedes saben el nombre de la extranjera les ordeno que me lo digan, o morirán! - exclamo la princesa Lena a sus dos prisioneros.
Ninguno de los dice absolutamente enojada a lo que la princesa, furiosa manda a llamar al verdugo, cuando este llego ordenó torturar a la esclava, quien a pesar del dolor no quería decir el nombre de su señora.
-podrás torturarme hasta el cansancio, pero jamás diré el nombre de mi señora. - Declaró Imra agotada por el dolor
- ¿Por qué no me dices el nombre de tu señora?, tienes la posibilidad de vivir- le dijo Lena asombrada e irritada.
- por amor, la amo tanto- respondió la esclava. –es mi declaración de amor, si le digo su nombre, entonces le habré dado mi amor por ella- tosió, - usted princesa, también caerá rendida ante su amor- miro al guardia a su lado, aprovechando la quietud de la princesa heredera arrebato del cinto del hombre una daga, empuñándola contra su cuerpo la clavó a la altura de su corazón, suspirando de amor por su señora, por su amor no correspondido.
La princesa la toma entre sus brazos mientras llora silenciosamente, los guardias arrebatan el cuerpo y se lo llevan junto a su padre a otra estancia, la extranjera se levanta furiosa del suelo, enfrentando a la princesa.
-esto es lo que has sembrado, un camino de sangre y sufrimiento, y ¿para qué?, para complacer tu estúpido e innoble capricho- le gritó. –todo en ti es una farsa, no eres una mujer fría- la mujer misteriosa se acerca a Lena acunando su rostro entre sus manos y planta sus labios sobre los suyos, Lena, ante la repentina acción se tensa, mientras su duro corazón se va ablandando, cuando el beso concluye acepta su derrota, y le rogó a la extranjera que por favor no la estreche contra sus brazos.
La misteriosa mujer, resignada se aleja, y mira a Lena con ternura-
-mi nombre es Kara, y soy hija de Zor El, rey de Argo-
Al terminar su confesión las trompetas del palacio resuenan, alertando sobre la llegada del amanecer.
AVISOS PARROQUIALES
oh mai gosh, Kara le ha confesado a Lena quien es, ¿ la va a ejecutar?... quien sabe.
Falta un tantico para terminar esta obra, espero les esté gustando.
ESTÁS LEYENDO
QUE NADIE DUERMA.
FanfictionLena, una fría princesa traumatizada por un hecho ocurrido a un miembro de su familia, decide vengarse de todos los extranjeros que deseen pedir su mano, plantea 3 desafíos, si aquel pretendiente falla, entonces morirá. Pero todo cambia cuando hace...