Capítulo 1.- Desire

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Partimos el año en familia como siempre y me quedé hasta tarde, sola en el balcón observando los fuegos artificiales de año nuevo, mis padres se despidieron de mi con un cálido abrazo, un beso en la cabeza y dejando en mis manos una taza de chocolate caliente, ellos conocían perfectamente que me encantaba pasar horas y horas observando aquel hermoso paisaje que era para mí la noche, y más cuando las estrellas se veían tan luminosas y cercanas como si tan solo alargando la mano pudiesen tocarse.

Pero no era así, no se tocaban y lo extraño de aquella noche -aparte de que hacía más frío de lo normal- es que yo me sentía diferente, aquélla despedida no me pareció común, parecía como si fuese la última, parecía más bien de esas típicas que me daban cuando me iba de campamento y estaría dias enteros lejos de ellos. Pero no tenía sentido.. yo no me iva a ir, ¿O sí?

Ignorando aquella locura mental, seguí contemplando -apoyada en el barandal de el balcón- los fuegos hasta que comenzaron a cesar, fue cuando un destello, parpadeo más de lo común junto con las demás estrellas, y de pronto me di cuenta de que era un estrella fugaz y sin pensarlo dos veces, cerré los ojos con fuerza y aunque no fuese de las típicas que creé en fantasías puse todo mi empeño y confianza en aquellas palabras que mostraban mi deseo.

-Quiero estar junto a ti.. Niall James Horan-Dije en un susurro para mí misma y sonreí satisfactoriamente.

Luego escuche leves golpecitos en la puerta y supe que era hora de dormir, avance hacía la cama ya con el pijama puesto y me quite las sandalias quedando descalza, para luego meterme bajo la sabanas y acomodarme cerrando los ojos para dormir horas y horas por lo tarde que era.

*********

El sol impedía que fuera fácil abrir los ojos, puse los pies en el suelo y quede sentada sobre la cama frotándome los ojos con la palma de mi mano, no encontraba las sandalias en el sitio que recordaba haberlas dejado y me levante con la intención de buscarlas, pero cuando abri los ojos se me olvido por completo buscar unas simples sandalias, no estaba en mi cuarto y lo peor...

¡¡ESTABA COMPLETAMENTE DESNUDA!!

Rápido me gire y agarré un sabana para ocultar mi cuerpo, pero fue complicado ya que algo lo impedía.

-Mmm..-Gimió alguien bajo las sabanas poniéndome los pelos de punta.

Asustada, queriendo gritar pidiendo ayuda, llamar a mis padres para que me sacaran de allí en silencio para no llamar la atención de quien dormía bajo esas sabanas de seda color azul; comencé -con la sabana enrollada en mi cuerpo- a caminar hacía atrás, con una postura un tanto extraña, tipica de una pelicula de guerra en donde alguien intenta pasar desapercibido ante su contrincante, pero no habia calculado, que hubiese un obstaculo por el piso y provocase que me tambaleace. Me puse de pie, colocando bien la sabana y con intención de mirar con lo que había tropezado; levante la vista y cuando estube a punto de girarme, me fije en el espejo de pie que tenía un poco mas adelante justo frente a mí. Al mismo tiempo que giraba cuando la puerta se abrio de par en par, dejando ver a un pequeño niño, de ojos color azul y cabellera rubia que me hacian recordar a alguien, labios ni muy finos ni muy carnosos, nariz fina y mejillas rosadas, traía un pijama de ositos muy linda.

-Hola mami-Dijo el hermoso niño, saltando a mis brazos sin yo esperarlo, lo había encontrado indefenso y me habia parado a observarlo, pero cuando me llamo "mami", no pude evitar quedar en shock y aún mas paralizada de lo que estaba, el niño se soltó sólo y abrazó mi pierna, luego corrió hacía la cama matrimonial y comenzó a saltar.

-Drew deja de saltar-Se quejo aquél hombre ,dejándome escuchar con más calma su voz; y girando, las sabanas se apartaron y el pequeño llamado "Drew" se tiró sobre el abrazandolo angelicalmente ocultando nuevamente con las sabanas quién demonios era aquél hombre, quizás dueño de la casa, con el que había amanecido completamente desnuda y.. mayor.

-Ya tranquilizate campeón, ayer nos acostamos tarde, ¿recuerdas?

El pequeño asintió, saltando nuevamente sobre el hombre y este se quejo falsamente.

-Feliz año nuevo, papi.

¿Mami...papi?

Ten cuidado con lo que deseasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora