Mi nuevo vecino

Capítulo 6: Otra Oportunidad

Los días han pasado muy rápido a mi parecer, Marina y yo hemos establecido una mejor amistad, en este tiempo e ido unas cuantas veces a su casa a estudiar o a pasar el rato en compañía de Gressia, Vanessa y Octavio. Ya que en mi casa no podía porque mi madre no me deja llevar invitados por que supuesta mente ella solo iban a fastidiar y hacer desorden, pero no fueran los de mi hermano porque ahí asta botanas les preparaba. Bueno a lo que iba todo estaba de maravilla entre Marina y nosotros.
Aunque el único problema de ir a casa de Marina era su hermano Marlo, rara ves estaba en su casa pero cuando estaba no se porque, tal ves por lo que me trasmitió en la primera impresión, ya ven que dicen que las primeras impresiones  hablan mucho de ti, y el no me simpatizo nada ni la primera vez que lo observe a través de la ventana de mi habitación  ni la segunda que lo tuve un poco más seca en la cena en su casa. Y ni modo que le diga a Marina que no quiero que el este ahí ya que es su casa no mía.
Ya era tarde por lo que nos estábamos despidiendo de Marina, como todos los viernes saliendo de la escuela vamos a una casa de alguien de nosotros "menos la mía ya dije el porque" para ver películas o simplemente platicar en tonterías , bueno hoy había tocado ir a casa de Marina.
Justo cuando íbamos saliendo Marlo hizo su aparición eso es algo normal ya que esa es su casa, pero no puedo evitar que su presencia me cause desagrado, así como íbamos saliendo saludaban al residen llegado menos yo, solamente pasé a su lado sin prestarle atención a su presencia.

Al llegar a la altura de mi puerta me despedí de mis amigos y entre a mi casa, me dirijo directamente hacia mi habitación ya que se que aún no hay nadie en la casa mi madre y mi papá están trabajando y mi hermano rara vez viene a la casa, a si que procedí en cambiarme y ponerme una cómoda pijama es mi favorita es de peluche con moñitos de colores mi madre dice que es muy infantil para mi edad, que tenga 16 no quiere decir que me vuelva como las payasas creídas de mi salón que se la pasan hablando de chicos y ropa. A mi eso me aburre. Y como dice mi papá es para dormir no para modelar. Justo cuando termine de cambiarme y estaba a punto de acostarme a alguien se le ocurre tocar a la puerta por lo que me hizo soltar algunos impropios. Cuando abrí la puerta vi que el que tocaba la puerta no era nadie más que Marlo por lo que hizo que me enojara más.

- Que quieres - dije cuando abría más la puerta

- Linda pijama - dijo señalando mi pijama con su dedo índice.
- Nada más vendiste a decir eso, oh gracias - eso último lo dije con sarcasmo mientras iba serrano la puerta

- No- dijo deteniendo la puerta con su mano y después se la llevó detrás de su cabeza - solo es que desde que nos conocemos tengo la curiosidad de que hice o porque no te agrado.

- La verdad no se porque, pero desde que te bi te me hiciste una persona creída, y simplemente no me simpatizante.

- wow.. Yo pensé que me veía genial - dijo con una sonrisa

- vez - dije señalándolo - por eso no me simpatías tienes pinta de creído

- lo siento - dijo - dame otra oportunidad de conocernos, te e visto como eres con tus amigos y quisiera que fueras así con migo, y que me dejes de mirar como si tuviera lepra

- OK, te daré otra oportunidad para conocernos y tratarnos mejor, pero para que te trate como a mis amigos necesitarás ganarte mi confianza

- me parece perfecto que te parece ir mañana a la plaza - dijo y al ver que no decía nada prosiguió - para que nos vallamos conociendo, si por favor - dijo esto ultimo juntando sus manos

- esta bien mañana vamos a la plaza - acepte agachado la cabeza con resignación - a que hora

- mm.. - se puso el dedo índice en la barbilla como le hace su hermana cuando esta pensando - temprano, que te parece a las 10am a si pasamos más tiempo juntos

- esta perfecto, asta mañana - dije cerrando la puerta
Genial los sábados y domingos son los únicos días que me puedo levantar a las 11am y por culpa de Marlo me tendré que levantar temprano en sábado.