Saving Souls | Soul Calibur

Saving Souls

   No logro recordar cuantas almas he pisoteado hasta esta fecha en donde por fin soy capaz de expresar algo sobre esto, sólo recuerdo lo culpable que he sentido en muchos casos. Han sido tantas pobres almas que no logro entender como es que no he sucumbido ante el mismo camino. Con el pasar del tiempo cubrí parte de mi rostro con una máscara de metal, quizá, para ocultar el rictus de dolor al ver a otro desafortunado caer en lo más bajo de sus propios instintos, todo eso por la lucha para evitar una nefasta tragedia, la misma que aunque parezca inevitable, todos luchan con tal de cambiar su suerte en este ciclo que parece no tener fin.

   Incluso llevando este pecado, tengo una motivación que no sólo me impulsa a evitar la maldad y me absorbe para combatir a las bestias, considero mis acciones totalmente justificadas y cubiertas por un razones bastante planificadas.

  —Oh, ¿con que planeas acercarte a la espada? ¿Incluso sin ser capaz de controlar tus propios pecados? Eres muy ingenuo.

  Siempre hay individuos que se dejan tentar por investigaciones erróneas e inexactas, leyendas urbanas falaces e ideales malignos de seres sedientos de poder. Todos ellos siempre buscan la manera de acercarse a la espada que alguna vez provocó una enorme masacre estando en las manos de un navegante vil y desalmado. Tan sólo un paso en falso de cualquier aspirante y caen en el abismo de la muerte, ello por dos causas.

  Son almas ilusionadas e ingenuas que desconocen una ambición de tal magnitud, pero logran percatarse del enorme caos una vez que ya es tarde.

  También, soy parte de ese abismo del que tanto se teme.

  Resultaría en algo catastrófico si otra alma desgraciada logra tener en sus manos un arma con un poder de tal calibre. Yo soy incapaz de controlar un poder vil como ese; conozco su mirada casi perfectamente, y sin embargo yo caería en sus garras alimentándola de pobres vidas que para él no son más que cosas insignificantes.

  Soul Edge posee una fuerza inimaginable. Eso induce a cualquiera para obtenerla. Pero es un poder más grande del que piensan mediante a hipótesis ridículas, todas ellas ignoran lo incontrolable de la hoja de metal, tan mastodónico que casi parece irreal. No es una tragedia que estoy dispuesta a permitir, porque un nuevo caballero de armadura azul traería una era aún más caótica, ¡resultaría en algo inaudito e inaceptable! Incluso si debo sucumbir a lo más bajo de mis posibilidades o recurrir a lo que yo considero desesperado, me niego a dejar pasar a otra víctima cuya alma estará inmersa en un agujero negro. Siento un pesar enorme en quienes no tienen malas intenciones y buscan la justicia a su manera, también en aquellos que reflejan una enorme pureza, pero la espada es capaz de corromper hasta el más santo de los guerreros.

  Por eso, los viajeros que conocen la leyenda expresan: «cuidado con la ninja Taki, Soul Edge y ella, quizá, vayan de la mano».