¡Boda Higuel!

La propuesta del gigante.

¡Hola! Por fin empieza la boda Higuel.

Para los que no saben, la boda Higuel es una actividad que se realiza en el grupo de Revolución Higuel que se juegan con las temáticas de la boda para escribir. Yo decidí participar con una amiga en este pequeño apartado, así que verán nuestros trabajos juntas que platicaremos más adelante. Participaremos con algunos universos que tengo, así que para mí será muy divertido.

Debo aclarar que los drabbles no están tan conectados a la historia ya que éstos están mas desarrollados. Tómenlos como un Spin off de sus historias, para saber más de éstas o los personajes.

¡En este drabble participo con la bella autora Sara PD! Busquenla en wattpad es la escritora de gracias a un fanfiction. Deben leer esa historia y no hacerse mensas.

Ella y yo decidimos participar con el universo del "La historia del hada y el gigante" el cuál pueden encontrarlo en mi perfil por si tienen curiosidad. Dónde Hiro es un hada y Miguel es un gigante.

Espero que disfruten de nuestra pequeña colaboración que me divertí haciendo :D

La propuesta del gigante.

Al momento de ser realista, el hada sabía que carecía de empatía hacia las demás personas. Era lo suficiente egoísta sólo para preocuparse de quienes lo rodeaban, y él sabía que no era el altruista rey para interesarse en un problema que no fuera más allá de su nariz.

El no era un rey como Tadashi, amable y preocupado por la unión entre sus pueblos. Tadashi era sabio, amable y sabia manejar un lider. Hiro, de no ser por la guía de Karmi hubiese perdido desde hace mucho el rumbo.

El no estaba apto para gobernar, y aún así tenia que hacerlo.

En virtud de todo su egoísmo, se veía en la consecuencia de declarar que esto no entraban con su esposo de considerable tamaño. Miguel era su centro de universo, y por ende, Hiro prestaba más atención a sus detalles y cambios de animo del que le gustaría presumir.

Por eso, fue fácil para él percatarse de la extraña actitud que domeñaba en el gigante en estos días. El morocho notó a Miguel últimamente extraño, siendo más específicos en esa tarde, casi no lo miraba y cuando daba mirada de reojo hacia él parecía que un destello soñador resplandecía con amor. Quizá estaba imaginando, él podría golpearse con la ala de un dragón para poder despertarse, pero juraba que sus ojos tenían un brillo, extraño, emocionado y que le llamaba la atención.

Sabia que Miguel estaba preocupado, o más bien algo coexistía en su cabeza. Hiro no necesitaba tener una conexión con el gigante para saberlo.

Aunque bueno, también ayudaba que estaban conectados y para Hiro era fácil cuando era que estaba inquieto el gigante. Por ende, con ese pensamiento en mente decidido averiguarlo a cita previa que era lo que estaba sucediendo.

—Hiro, ¿puedo hacerte una pregunta? —inquirió de inmediato, el hada asintió y con una sonrisa llena de ternura hablò.

—Sabes que puedes preguntarme cualquier duda que tengas, Miguel.

Delegó de su lado, estaban en el medio del bosque, el Hada yacía entre las palmas acunadas del gigante y él otro evitaba la mirada a toda costa. Acción en perjuicio que no le gustaba demasiado al rey.

Pero decidió darle su espacio y esperar paciente a que éste tuviera la confianza de soltarse, para su suerte no tuvo que esperar mucho.

—¿Qué es un matrimonio?

La pregunta dejo perplejo al Hada y la sonrisa se borró.

El Hada tenía que admitirlo, cuando Miguel terminó buscándolo para que pasarán la tarde, nunca pensó que la conversación se desviaría a otro concepto totalmente fuera de si. De flores, y el como las sirenas le habían robado su comida se desahogarían en el contrato voluntario que los humanos decidieron llamar matrimonio.