Vecinas pero muy distintas

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La tristeza es una de las vibraciones que prueban que estamos vivos, pero yo no me siento viva, solo respiro y finjo seguir adelante cuando lo único que quiero es detenerme y dejar de caminar, me asusta, me aterra lo que pueda pasar si doy otro paso.

¿La cagare? Seguramente ¿Acertaré por fin? No, ni de coña ¿Y si te caes, y si ya no tienes fuerzas para levantarte de nuevo? ¿Y si has alejado a todos y no hay nadie que pueda, o quiera, ver a través de esa falsa sonrisa? ¿Y si todos creen que estoy bien, como tantas veces he dicho?

Todas las preguntas se acumulan en mi cabeza y no tengo respuesta, tampoco creo que nadie la tenga, yo misma me he enterrado en este pozo. Por ser una miedica. Por no tener ganas de caer de nuevo. Por dejar que me rompan una y otra vez. Por ser débil. Por llorar sin motivo, y no hacerlo cuando sí que lo había. Por aislarme. Por pensar que alguien vendría a sacarme. Por mentirosa. Por fingir sonrisas. Podría seguir numerando cosas que e hecho mal, que son muchas, o también podría salir a la calle e intentar hacer algo productivo.

Eso debería hacer, pero se está genial en lo seguro de la soledad, no es el mejor sitio, es húmedo y oscuro, pero he estado en sitios peores, ¿conocéis esa habitación donde te mandan después de romperte el corazón? ¿Y esa otra, en la entras tú sola buscando algo que no existe y te das cuenta lo tonta e ingenua que has sido? Muchas habitaciones en la casa de la tristeza, pero solo una habitación en esa otra, en la que siempre hay luz y colores. En esa casa donde todos ríen y bailan al compás de una delicada música, en esa en la el acceso está restringido y hay que pagar entrada. ¿Como se paga? Fácil, siendo realmente feliz, ahí no basta con decir "estoy bien", "no me pasa nada" tienen que notar como la alegría sale por cada poro de tu piel y ver en ti una sonrisa de verdad, no esa que le das a un vecino cuando te lo encuentras el ascensor.

Solo os digo una cosa la otra casa el la hostia, luchad por estar ahí, luchad por ser quien os de la puta gana, pero no vengáis conmigo, no os jodais por nada, de verdad no lo hagáis.

Una vez jure intentar ser feliz, no le había tomado importancia hasta ahora, hasta que me he dado cuenta que la felicidad no son solo sonrisas y estar triste no significa tirarte el día llorando. Hay felicidad en la tristeza y también hay tristeza en la felicidad, aunque menos, tendemos a decir que estamos tristes en cuanto nos pasa algo y hay gente que no se da cuenta que tal vez ese algo ha pasado por alguna razón, y si, puede ser una putada pero dicen que siempre hay salida, yo voy a buscar la mía. Porque hace tiempo me dijeron que merezco ser feliz. No me lo creo del todo, pero por intentarlo no pierdo nada ¿no?

~Xx~

F(uck)M(y)L(ife)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora