❝ 𝐍𝐨𝐭𝐡𝐢𝐧𝐠 𝐭𝐨 𝐥𝐨𝐬𝐞... ❞ [AU pt.1/?]

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Leonardo Víctor San Juan; hijo menor de Fernando San Juan y María San Juan, dueños de la grandísima y reconocida empresa del mejor pan de México "𝔅𝔬𝔫✥𝔓𝔞𝔫𝔢", era sin duda, para algunos el chico más detestable del colegio Zaragoza, para otros un raro sádico. A diferencia de sus hermanos, Nando —el mediano— y Victoria —la mayor— él no era popular, ni reconocido por nada importante  como ellos. Nando era el galán de la prepa, había tenido por novias incluso a modelos bastante guapas  y conocidas; en cambio, Leo sólo había tenido 2 novias, con las cuales terminó por su explosiva actitud muy rápido. Victoria: una chica de 17, un año mayor que Nando, delgada, ojos miel y cabello demasiado corto; la chica más inteligente, madura y elegante de la prepa, apunto de tomar gran lugar en la empresa de sus padres; actualmente con un novio formal. Leo, la purga de Nando, la oveja negra de la familia, era un chico invisible, hasta que en séptimo grado mandó a uno de sus compañeros al hospital...

—¡Una semana de suspensión! —reclamó la madre de Leo—. Después de dos larguísimas semana de trabajo nos sales con esto —reclamó, su fuerte voz rebotaba en la sala entera.
—No me gané esa suspensión por nada... —contradijo Leo.
—¡No! ¡Mandaste a tu compañero al hospital!
—Já. No fue porque quise; él empezó.
—Estás llevando esto muy lejos, San Juan. ¡Llevas nuestro apellido, deberías seguir el ejemplo de Victoria o Nando!
—¡De todos modos odio la escuela! ¡Odio a mis compañeros! ¡Odio a los maestros! ¡Odio todo! —con esa palabra finalizó y salió corriendo de la grandísima casa. A sus tempranos 9 años ya odiaba todo.
—¡Leo! ¡Regresa ya mismo! —le gritó inútilmente.

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Cada que Leo se sentía mal iba a la iglesia, aunque era raro que asistiese ahí. No era religioso, mucho menos creía en el ser superior al que todos alababan y temían. Él respetaba las creencias de los demás, incluso las veces que iba daba una cantidad favorable cuando terminaban las oraciones. Asistía ahí por la tranquilidad del lugar, la gente respetuosa y el padre Godofredo. Leo se desahogaba con él y él le daba excelentes consejos, lo hacía sentir más tranquilo.

Si Leo no estaba con el padre Godofredo, estaba con su mejor amiga: Teodora. Al igual que él, Teodora era una chica invisible. Su forma tan chillona de hablar al principio le dio mucho que pensar a Leo, luego descubrió que sólo se educó así, y que por dentro era una chica agradable. Prácticamente ella era la única amiga de su edad, durante la primaria conoció a sus, ya ex-maestros: Rafael (Alebrije), —su maestro de español— Evaristo —su maestro de artes— y Andrés —maestro de historia—. Muchas veces ellos sacaron de problemas escolares a Leo, prometiéndole a el director darle orientación personal, gracias a ello tuvieron una cercanía más fuerte.

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Ahhhh, tengo unas grandísimas ganas de hacer más de este AU :'). Pero mis 827 historias que debo editar me lo impiden AHH ):

【 -💀;】ᴼⁿᵉ ˢʰᵒᵗˢ || 𝐋𝐚𝐬 𝐋𝐞𝐲𝐞𝐧𝐝𝐚𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora