【 -💀；】ᴼⁿᵉ ˢʰᵒᵗˢ || 𝐋𝐚𝐬 𝐋𝐞𝐲𝐞𝐧𝐝𝐚𝐬

❝ Pᴏsᴇsɪᴏɴ ❞ [AU pt. 2/?]

—¿ESTÁ LOCA? —gritó el psicólogo Efraín, enfadado por la decisión de la madre.

—¿Y qué querías? —se defendió la señor San Juan—, ¿¡que Leo hiriera a Nando!?

Efraín gruñó, quería abofetearla, mas no podía por el gran respeto que le tiene a las mujeres. No soportó la idea de saber que los padres de su joven paciente le tenían tanto miedo. Tomó un portafolio marrón de cuero, lo abrió, desesperado. Sacó del mismo un folder de plástico, con una etiqueta de nombre "San Juan". Al mismo paso parecía que buscaba un papel importante.
Lo encontró.

—¡Vean! —elevó el papel a la contraria para darle a entender su error.

La señora San Juan tomó la hoja entintada, leyó con atención junto con su esposo. Un detalle en particular fue el que los impresionó entre todo el documento.

"Padecimiento: Esquizofrenia simple"

La mujer se paralizó. ¡¿PERO QUÉ?! El padre dijo que había un demonio, y ahora su psicólogo confirma que tiene un caso de esquizofrenia. No entendía nada.

—Leo no tiene un "demonio" —intervino el experto—, tiene esquizofrenia —saco del mismo folder una hoja de cuaderno cuadriculada—. Mire —exhibió que en ella había un dibujo; al parecer viejo, ya que se veían rayones de un niño pequeño.

En el inocente dibujo estaba Leo, a su lado dos niñas, comunes y corrientes. Una grande lagartija colorida y un caballero con armadura. De lado derecho, el más aterrador de los personajes: una mujer, con vestido rojo y ojos del mismo; los rayones de crayón abundaban más en esa figura, haciendo sudar frío a la San Juan.

— No corra a su hijo. Si no tratan esto a tiempo sí será demasiado tarde. Los esquizofrénicos tienen a auto-lesionarse o a otros con el paso de su enfermedad —dijo, con toda la seriedad del mundo, dando a entender que esto era más que un juego—. Tome —le brindó un frasco carmesí oscuro de cristal, tenía una etiqueta en él: "Trifluoperazina".

Este medicamento de nombre complejo era utilizado como anti-psicótico, tranquilizante, ansiolítico y antiemético. Perfecto para Leo, pensaba.

[...]

—¡Leo! —gritó la madre del mismo corriendo al patio, lugar donde lo había ignorado hace unas horas. No lo encontró—. ¡Nando! —gritó por ayuda del mayor, el cual la atendió de inmediato.

—¿Qué pasa? —dijo, preocupado.

—¿Dónde está Leo?

—No lo sé. Salió corriendo; en serio estaba enfadado. No me dejó hablar con él o... —dijo intentando liberarse de cualquier culpa.

[...]

En cuanto al contrario... estaba ahí, en el mismo lugar de siempre; sentado de rodillas, llorando. Cada que se sentía una miseria: una carga, acudía al cementerio, donde la tumba de su abuela era su única consolación...

—Mira, Leo —la mayor mostró un marco, estaba ella de niña, alado suyo otra niña de vestido extravagante y otra con un huipil naranja. El pequeño de 6 sólo prestaba atención —; ellas eran mis amigas, prácticamente las únicas que tuve. Mis primas nunca fueron una gran compañía —añadió.

—¡Se ven m-muy lind-das! —sonrió con toda la sinceridad e inocencia del mundo.

—¿verdad que sí?

El niño bajó la cabeza, de un momento a otro se decayó, como si algo malo realmente hubiese pasado.

—¿Qué pasa, Leito? —preguntó, con preocupación.

—Yo... s-sólo... me gust-t-taría tener amigos. Nando m-me molest-ta todo el rato... y... —comenzó a llorar, el pequeño apenas con esa edad ya sentía el pesar de estar solo.

Abrazó a su abuela. Se desahogó con ella.

—Yo siempre seré tu amiga, Leo —intentó animar al pequeño—. Siempre...

Esa última palabra hacía un eco en su mente "siempre". Extrañaba a su abuela, a su primera amiga.

—¿'Ora, tú? ¿Qué traes? —reveló la voz la dulce Xóchitl—. No te había visto aquí desde ya tiempo.

—Mi familia son unos idiotas. "Un demonio" no me sorprenderá que me saquen a patadas de la casa. Y todo porque "Nando corre peligro" "Nando puede salir poseído" "Nando es el único que importa" —se quejó—. Tal vez Luka me dé alojamiento, pero debería trabajar.

—¿Y si no es así? —intervino la fantasma.

—Meh. En ese raro caso yo me iré. Ya no los aguanto, menos a mi padrastro.

—Quién sabe cómo termine esto, San Juan.