Tall ||LuWoo||

o

—Y recuerden, este mall es muy grande, si se pierden solo llámenme que iré a buscarlos.

—Ya cállate TY.

Fue curioso ver como veintiún personas tomaron rumbos completamente distintos pues todos tenían sus propias cosas que atender; siendo bastante gracioso el hecho de que algunos pasaban de ir a secciones normales como la de música, y como otros iban "disimuladamente" a ver y comprar en secreto peluches o libros infantiles para colorear.

Jaehyun, haz sido descubierto.

Y ahí estaba Jungwoo, con el ceño fruncido y sus labios abultados después de haber estado casi media hora probándose camisetas y chaquetas sin obtener resultados positivos. Rendido, sacó su celular para enviarle un mensaje a su pareja.

Lucaaaas

Xuxi♡'･ᴗ･'♡ 

Bebé, ¿dónde estás? 

En el segundo piso, no encontré nada interesante así que quiero estar contigo. Dime donde estás (个_个)

Xuxi♡'･ᴗ･'♡

Quédate ahí, ahora voy para allá

Bueno

uwu

El mayor no tuvo que esperar demasiado para que el chino apareciera, saludándolo con un beso en la mejilla.

—Déjame adivinar, ¿mangas cortas?

—Mangas cortas. ¡No lo podrás creer! Encontré algunas camisetas que eran de mi talla, pero incluso las de mangas largas me quedaban arriba de las muñecas.—El coreano cruzó sus brazos frustrado, Yukhei rió tiernamente mientras revolvía su cabello.

—Tranquilo, los pantalones de mezclilla que me probé me quedaban tan cortos que dejaban ver mis calcetines de puntitos.—Ambos se miraron y soltaron una carcajada, el hecho de nunca encontrar prendas que fueran lo suficientemente grandes para ellos ya era como una rutina.

Lucas y Jungwoo decidieron entonces buscar ropa juntos aprovechando que eran casi del mismo talle, con la diferencia de que el chino tenía un poco más de musculatura en su torso. Y, a pesar de no encontrar lo que buscaban, se tomaron la situación con humor.

Todo transcurrió perfectamente mientras se mantuvieron viendo zapatillas deportivas, ambos tenían gustos muy similares así que no había problema. Cuando ya habían recorrido toda la sección Jungwoo tironeó suavemente la manga de Yukhei para llamar su atención.

—Xuxi, vayamos a ver pantalones, necesito nuevos jeans.—El chino asintió.

Después de aproximadamente veinte minutos, los ojitos del mayor se iluminaron cuando divisó unos bonitos jeans color negro rotos desde los muslos hasta por debajo de las rodillas, en ese instante se dijo así mismo que debían ser suyos. Después de avisar a la encargada de aquel negocio, fue hasta los probadores indicándole a Yukhei que lo esperase afuera mientras se cambiaba.

Pasaban los minutos, Yukhei se preocupó al notar que el otro estaba tardando más de lo que hubiera deseado. Se puso de pie y se acercó para hablarle.

—Bebé, ¿estás bien?

—Xuxi...—Le habló desde el otro lado de la puerta.—Estos pantalones son realmente lindos, pero...