SOLEDAD

10 1 0
                                    

Sabes dama mía,  siempre me he preguntado, ¿por qué siempre usas colores obscuros?,  algunos dicen que es porque eres ciega y no ves el  color de la realidad.  Pero yo no pienso igual, querida dama, yo creo que usted ve los matices grises de los ojos de sus acompañantes,  viendo la realidad a través de visores opacados por la crueldad de quien es los portan. Querida acompañante mía,  de bellas  facciones,  pero de ojos caídos que con un mirar representan la nostalgia,  desesperanza y agonía de quienes te acompañan.

"¿Porque Madame,  que es lo que acontece en sus pensaras para que transmita esa mirada tan pérdida y vacía?"

El recuerdo de esa pregunta y de como tu mirada desolada se poso sobre mi,  aun me atormenta,  me persigue; lo que conllevó tu respuesta me partió el alma,  y me quebrajo  en mil demonios.

"Eh de ser tan obvia,  pero,  no puedo evitarlo, el saber que prontamente encontrarás algún nuevo acompañante y te alejaras de mi,  para que después del martirio regreses a mi regazo, odiandome;  pero lo que más me agobia es el hecho de saber que por mucho que me alejes siempre regresaré,  sin importar el odio que tengas hacia mi."

Esas palabras llenas de tristeza y de ~soledad~ que irónico,  que ese mismo sea tu nombre querida dama mía.
El recuerdo de saber que esas palabras se realizaron como si de una predicción se tratase,  exceptuando el hecho del odió,  puesto que al regresar contigo, Madame,  te prometi jamás alejarme de tí.
Terrible condena ha caído sobre mi,  señora mía,  ¿por qué me has hecho esto?,  ¿qué has visto en mí.?,  será, ¿qué realmente te importó?  Mi lady, tu que jamás te apartas de mi,  tu que me ataste a tu ser y me impide la libertad,  ¿ qué planes tienes con mi alma como para atarla de esta forma? 

La última vez,  me presentaste a tu mejor amiga,  sabes,  me sentí tan celoso de verte junto a ella, "Depresión" Así la nombraste,  una dama con apariencia tan frágil y delicada, como si al primer tacto re fuese a romper,  pero así como ves la delicadeza en ella puedes notar que es un arma de doble filo en su ser.

Ahora estoy prisionero de ambas,  esclavo de la soledad~ muñeco de la depresión~.
Mis ladies, queridas damas de compañia,  espero poder tomar de ustedes un poco de su tiempo,  para que así lean estas cartas,  a mi preciada mujer de matices grises,  mi querida dama de la soledad.

Atte: tu fiel esclavo y títere.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 05, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cartas A La Soledad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora