Era un dia como cualquier otro, bueno no para mi, ese dia, ese pedaso de tiempo que llamamos dia, donde tenemos nuestras actividades, yo tenia una cita con una chica, era mi primera cita, a pesar de que dicen que poseo una apariencia de principe de cuento o de galan de novela(ok tal vez exagero), no pude hacer una relacion o tener amigos pero, esa chica de pelo negro y ojos de un hermoso amatista me invito a salir el primer dia que me mude a la ciudad de Kuoh, yo venia de Tokio, asecte feliz, tal vez ese era el inicio de algo bueno, que pena que la vida no siempre es buena con uno, salimos, nos divertimos y todo, la lleve al cine y eso, pero al atardecer estabamos en un parque, no habia nadie pero no me importo, ella me queria pedir algo, tal vez un beso, si era eso podia morir feliz, pero lo que dijo sin duda me perseguira "¿Moririas por mi?" Y hay sin mas, me apuñalo con una especie de lanza de luz y me dejo tirado, la sangre salia a choros y no podia detenerla, la vida se me escapaba, pero sin creerlo vi mi sangre roja para despues pasar a ver el atardecer tan dorado, derepente senti a otra persona, su cabello amarrado en dos coletas que parecian taladros, sus cuerpo bien desarrollado a pesar de ser menor que yo y sus hermosos ojos zafiro, sentia que la habia bisto ¿pero donde?, dijo unas palabras que cambiarian mi mundo, "Vive por mi", despues de eso, todo se puso negro, ok tal vez me adelante un poco bamos a regresar a donde todo comenso y de paso esplicar mi problema con mi parentesco....
Era un dia como cualquiera en Tokio, la capital de Japon, en una casa recidencial que se notaba de gran lujo, una persona se retorcia en las sabanas de su cama, la causa, el sol entraba por las percianas de su bentana, haciendo que la persona tubiera que levantarse a regañadientes.
Puto sol...algun dia te apagare y dormire lo que quiera-se notaba por su voz que era un joven de almenos, 16 años.
¡Issei, deja de perder el tiempo, vas a llegar tarde!-se escucho la voz de una mujer desde la planta baja.
¡Ya voy Margaret!-dijo el joven terminando de quitarse las sabanas, revelando una particular cabellera blanca como la nieve y unos particulares ojos color sangre, este joven era Hyodou Issei, hijo unico de la familia Hyodou, fue directo al baño a sepillarse y lavarse, para un vez mas regresar a su dormitorio y sacar su uniforme escolar, al terminar de colocarselo baja a la planta baja, hay se topa con Margaret, la mencionada era una señora ya en sus 40 años pero no los aparentaba, tenia su cabello castaño amarrado en una cola de caballo y llevaba un uniforme de maid resaltando su gran figura.
Buenos dias, Issei-.
Buenos....dias....(bosteso)-dijo Issei aun con sueño.
Te desbelaste de nuevo ¿verdad?-.
No.....bueno si-.
Haaa...ve a desayunar y prepararte para ir a la escuela-le dijo la maid, Issei se limito a asentir e ir a reclamar su fuente de conbustible. En el camino a la cosina bio el gran cuadro de sus padres.
Issei Hyodou era hijo del presidente de las empresas Master. Tecnologi. una empresa especialisada en el ambito tecnologico, su padre era un hombre alto de cabellera negra y ojos anbar, su madre era una hermosa mujer de cabello blanco y ojos azules zafiro, de hay la pregunta, de donde esa apriencia, al nacer Issei los doctores y sus padres se impresionaron, a pesar del contraste con sus colores, Issei era la viva imagen de su padre, tanto en estilo de cabello como parte de su personalidad, al acerle estudios descubrieron que el niño habia nacido con una particularidad en el codigo genetico, algo tan raro que la posibilidad de suceda es de 1 en un 10000. Al parecer el niño desarrollo ese particular aspecto gracias a eso, aun asi sus padres siempre lo amaron y concintieron, despues de todo, era su unico hijo, ya que el procedimiento fue de verdad dificil haciendo que la mujer ya no pueda dar a luz, Issei se habia sentado en una gran mesa y Margaret le paso su desayuno y se dispuso a comer, curiosamente no habia nadie en la casa, solo Issei y Margaret, no es que hubiera diferencia, Margaret siempre fue una segunda madre para Issei, terminando de comer, Issei levanto su plato y lo llevo al fregadero, despues agarro su mochila y se dispuso a irse.
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Entre la Phoenix y la Gremory, Rojo Y Dorado
Randomun joven de pelo blanco ceniza y ojos rojo sangre es asesinado en su primera cita, pero una hermosa mujer de cabellos rubios y unas particulares alas de fuego dice que lo puede revivir a cambio que le brinde su lealtad, lo que lo lleva a detener la...