Podría enpezar mi día diciéndome. "El sol entró por mi ventana iluminando mis ojos haciendo que estos se abran". Pero no, lo que me despertó fue el odioso sonido del despertador. Ademas que cierro las ventanas y las cortinas donde ningún rayo de sol entra, haci que me es imposible que me despierte con el sol.
Me levanto somnolienta y mi mamá entra en mi habitación.
-¡Hija, vamos primer dia de escuela! ¿No estás emocionada?- dijo mi madre muy emocionada. Ha veces mi mamá en las mañanas se levanta con muchas energías y eso es un poco molesto ya que no me gusta que me molesten cuándo recién me despierto.
-Si, si muy emocionada- dije en un tono un poco sarcástica ¿A quién le emociona volvel a la escuela? Levantarce temprano, maestros gruñones, tareas, exámenes. No me malinterpreten, no es que no me guste estudiar ni nada, de hecho tengo muy buenas calificaciones ¡pero de verdad cansa y es aburrido! Pero que se puede hacer.
-Vamos ve a ducharte y luego baja a desayunar- dijo mi madre.
-Bien, ya voy.
Me dirige hacia el baño y me tomé una ducha para estar más fresca. Fui hacía la cocina, dónde vi a mi mamá preparando el desayuno.
-Hija, siéntate haci luego te lleve a la escuela. No quiero que llegues tarde a tu primer día de escuela- me miró y me sonrió.
Me senté y empecé a desayunar un rico café con leche con unas tostadas. Mi mamá se sentó a mi lado con su café y me sonrió.
-¿Tienes ya todo listo, Jess?- me preguntó
-Si- le respondi llevandome la tostada a la boca.
Terminamos de desayunar y nos fuimos al auto para dirigirce a la escuela. En el recorrido me llegó un mensaje de Livia, ella es mi mejor amiga desde jardín. Abrí el mensaje y decía.
Eyyyy bitch, como estás? Ya te extrañaba, te fuiste de viaje y no supe nada de ti. Ya me la pagaras cuándo llegues. Estoy llendo a la escuela, te espero. Livia.
Sonreí y le estaba por contestar cuándo me di cuenta que ya había llegado.
-Bien, llegamos. Portate bien y conoce algún chco guapo- me dijo sonriendo.
-Mamá, ya conosco a éstos chicos y son todos unos idiotas- le dije rodando los ojos.
-Bien, pero tal vez conoces algún chico nuevo que te llame la atención- suspire frustrada y me bajé del auto.
-Nos vemos mamá, no te olvides de recogerme.
-No lo hare, diviértete- me dijo para luego marcharce.
Me dirigí hacía el gran edificio, dónde se encontraban muchos chicos y chicas hablando muy animadamente. Ya adentró fui a secretaría a buscar mis horarios.
-Buuuuu!!!- sentí unas manos en mi cadera haciéndome sobresaltar. Me di la vuelta y vi a mi mejor mejor amigo riéndose. Aún estaba igual de alto, cabello negro, ojos grises y parcece que había ganado más musculos. Realmente era muy guapo. Hace unos dos años él me gustaba pero luego se me pasó.
-¡Idiota me asustaste!- le dije golpeando su hombro.
-Hubieras visto tu cara- dijo aún riéndose, a lo que rodee los ojos.
-Hola Dereck, veo que aún sigues siendo un idiota- le dije burlandome.
-Hola Jess, que bueno es saber de ti luego de tanto tiempo- me dijo dándome un enorme abrazó.
-Si, lo siento. Es que halla en las montañas no hay señal y me la pase todo el tiempo fuera- le explique con una mirada triste.
-Esta bien, no te preocupes- me sonrió.
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El chico de los ojos azules [Editando]
Ficção AdolescenteJessica Stow es una joven de 17 años, una chica con buenas calificaciones, buenos amigos y apasionada por el amor. Esta por regresar a su penultimo año de la preparatoria. Cuando conoce a un chico misterioso y cerrado con un oscuro pasado que se enc...