Siempre Tuyo [ ChanBaek & BaekYeol ]

Capítulo 39 - Cuando te Conocí [ TaoRis - Parte 1 ]

Tao mejor conocido como Huang ZiTao era uno de los mejores estudiantes de su academia, era alguien ejemplar, un modelo a seguir y el favorito de muchos maestros. Varios chicos le tenían envidia dado a la atención que estaba recibiendo. Tao era el presidente de la clase, el encargado de ciertas actividades de la preparatoria, y de muchas cosas más. Pero no crean que él se sentía muy a gusto con toda responsabilidad siendo un joven solamente, Tao aceptaba los cargos por el simple hecho de tener pena a rechazar a sus superiores que le solicitaban los favores con una sonrisa en el rostro.

Increíblemente recibía mucha atención por parte de las chicas de la preparatoria, lo consideraban un chico guapo y muy atractivo. Tao llegó a tener una relación solamente la cual no duró mucho dado que tanto trabajo que tenía encima. Era poco el tiempo que otorgaba a su pareja, Fang Yin el cual era su nombre comprendía y estuvo de acuerdo en quedar con el chico como amigos solamente.

Los días pasaban y cada vez más se acercaba el día de la graduación, significaba una sola cosa, que pronto dejaría el país para asistir a la Universidad Nacional de Seúl, una educación de calidad donde el chico fue aceptado sin problema alguno. Aprendió Coreano desde mucho más joven, sabía muy bien que cuando le llegara la hora dejaría el nido y asistiría a esa institución.

El chico le entusiasmaba en el hecho que estaría fuera de su país y se sentiría libre de vivir solo y hacer lo que le plazca en su apartamento que su padre ya consiguió para él. Los días seguían pasando hasta que finalmente el último día llegó y todos estaban muy emocionados que la campana sonara de una vez por todas para saborear el olor a la libertad y solo preocuparse por ir a la graduación que sería dos semanas después. A tan solo veinte minutos restantes, todos charlaban y discutían lo que harían en el verano antes de irse por sus caminos separados y no verse las caras por un largo tiempo. El director entró por la puerta con una cara sonriente pero provocando a la vez que todos tomaran asiento y esperaran lo que estaba por escupir fuera de su boca.

ㅡ Buenas tardes alumnos, como saben hoy ya es el último día y supongo que todos ustedes esperan que esa campana suene para largarse de una vez por todas ㅡ los estudiantes rieron ante ese comentario, tenían suerte que su director fuese de los que también hacen bromas de vez en cuando y no ser de los que tienen cara larga todo el tiempo ㅡ pero sin embargo estudiantes vengo con un comunicado que será un poco raro para ustedes, el día de hoy estamos recibiendo a un nuevo alumno que es transferido, jovencito por favor pasa y preséntate ante tu clase de 15 minutos.

Todos los alumnos rieron de nuevo incluyendo su maestro, ya por así decirlo su director no estaba mintiendo. El timbre casi sonaba para que todos salieran corriendo exigiendo libertad de no estar ahí por un segundo más. El chico entró en la clase con su uniforme puesta, era alguien alto con un peinado con su pelo acostado como si hubiese sido planchado de lo lizo que se miraba. Tenía una mirada seria como de pocos amigos, de los cuales debes de tener miedo con solo verlo o escuchar su nombre. Todos lo observaron muy atentamente, el joven se paró en medio de la clase en frente donde esbozó una sonrisa sin mostrar sus dientes, pero no una sonrisa de alegría como uno se esperaba.

ㅡ Hola, mi nombre es Wu YiFan, lamentablemente fui transferido en el último día lo cual es ridículo pero da igual. Solo espero de aquí a graduarme con ustedes, es todo lo que diré ㅡ dijo haciendo una reverencia de 90° grados.

Sin nada más que decir caminó hacia el primer puesto vacío el cual de una manera oportuna era el que estaba junto a Tao.

El director salió y todos volvieron a lo suyo antes de que su superior entrara por la puerta para hacer lo que fue a hacer. Tao estaba dudoso si le hablaba o no, YiFan estaba concentrado jugando con su teléfono móvil sin prestar atención lo que estaba sucediendo a su alrededor. Faltaban tan solo diez minutos los cuales se sentían que eran horas, puede que era de la desesperación de todos por ya irse, el tiempo nunca está de tu lado en este tipo de momentos. Era común que corría rápido cuando se trataba de entrar a clases y no cuando ya era de salir.