Capítulo III La fiesta

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Hoy es el día, al fin nos veremos, me levanté más temprano para poder arreglarme, es la primera vez en mi vida que me importa mucho gustarle a alguien quiero verme bien para ella.
Estoy muy emocionada, no solo la voy a ver, sino que también ambas nos vamos a quedar en casa de Alejandra, que nervios, nos vamos a quedar en el mismo lugar.
Me apuro lo más que puedo y me estoy esmerando mucho en mí, me plancharé el cabello y usaré tacones, lo único que no haré será maquillarme, no me gusta el maquillaje y, aparte, no sé maquillarme, mejor no me arriesgo.
La hora ha llegado, me tengo que ir.
-Ya me voy mamá.
-¿Así? ¿No te vas a maquillar?
-No, así.
-Valeria menos píntate los labios.
-Buenos, está bien.
Mi mamá me ayuda a pintarme los labios y, ahora sí, salgo de casa.

Rayos, llegué media hora antes, espero que lleguen a las 2:30 para no esperar mucho tiempo, mientras iré al Oxxo a comprar cigarros y unos chicles.
Marlem manda mensaje al grupo.
-¿Cómo van?
-Bien, ya estoy aquí.
-No manches, ya voy ¿En el centro?
-Sí, en el centro.
-Noo, no quiero caminar sola.
-¿El camión no te deja en el centro?
-No, ¿Ya llegó Alejandra?
-No.
-¿En qué punto del centro nos vamos a ver?
-En el Oxxo.
-Ok.
Camino en dirección al Oxxo, cuando veo que a Alejandra llega con Gabriel, su hijo.
-Hola Alejandra.
-Hola Valeria.
-Hola Gabriel.
-Hola.
Alejandra manda mensaje al grupo diciendo que ya llegó, enseguida contesta Marlem.
-Ya voy para allá, es que no pasa el camión.
-Ok, aquí te esperamos.
Son las 3:00 y Marlem aún no llega, se está demorando mucho.
Llegó un amigo de Alejandra con su hija, los saludamos y solo queda esperar por Marlem.
Pasan algunos minutos cuando la veo llegar, ¡Oh por Dios! Marlem se ve hermosa, tengo un sentimiento muy raro en el corazón, está latiendo muy rápido y siento algo en mi estómago, es algo indescriptible, me siento como en la película de Hotel Transilvania, siento que... hice click, ya sentía algo por ella, ya me gustaba mucho, pero ahora me ha hipnotizado.
Marlem saluda a Gabriel y a Alejandra, hacen las respectivas presentaciones y al final ella me saluda a mí, yo la saludo lo más normalmente posible y nos disponemos a marcharnos.
Quiero lucirme, así que, para no irnos en taxi, pido un Didi desde mi aplicación.
-Listo, que llega en cuatro minutos.

Pasan los cuatro minutos y llega el Didi, no me quiero ir atrás con Alejandra y su amigo, me da pena ir de mal tercio.
-Yo pido adelante,- dice Marlem.
-Aaww, yo quería ir adelante, -digo, -bueno está bien vete adelante y yo me voy atrás.
Marlem se sube atrás y me deja ir adelante, genial.
Llegamos a la fiesta, Alejandra divide la cuenta en cuatro.
-Toma Valeria, lo mío y lo de Jorge.
-¡Ah! Ok, está bien.
Pago el Didi y no le digo a Marlem, yo pago lo de ella.
Wow, somos las primeras en llegar, no hay nadie más, nos sentamos en una mesa y nos sacamos fotos, solo nos queda esperar a que lleguen los demás invitados.
Estoy muy nerviosa, no sé de qué hablar, pero quiero hablar de algo con ella, me pregunto si ella se sentirá igual que yo, si todavía sentirá algo por mí y qué habrá pensado cuando me vio.
-Valeria, ¿quieres salir a fumar?
-SÍ, claro.
Marlem y yo salimos a fumar, genial, estoy emocionada.
-¿De cuáles traes? ¿Fumamos de los tuyos o de los míos?
-Pues, si quieres de los tuyos.
Marlem y yo fumamos de mis cigarros, estoy disfrutando el momento, solo ella y yo.

Mi viejo gran nuevo amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora