Entramos a la fiesta y ya habían llegado más invitados y poco a poco iban llegando más, nos sentamos en la mesa y ella se sentó a mi lado, Alejandra está con su amigo y me siento como en la prepa, solo somos ella y yo como cuando iniciamos nuestra amistad.
Grettel y su esposo llegan a saludarnos, después se van a sentar a otra mesa; nos llevan la comida y algunas cervezas, genial, tal vez con la cerveza se me quiten los nervios de hablar con Marlem.
La fiesta sigue y Marlem y yo hemos hablado de varias cosas, de su escuela, de la mía, le platiqué de los cursos de francés y alemán los que he ido, quiero quedar bien ante ella, solo fui dos semanas a mis cursos de alemán, la verdad siento que no aprendí mucho, pero lo estoy presumiendo como si fuera una máster, espero que no me empiece a hacer preguntas sobre eso.
Les platico a Marlem y a Alejandra de mi profesora de alemán, una chica alemana que vino a México de intercambio, en fin, el tiempo pasa y me pongo más nerviosa, Marlem y yo hemos estado hablando durante toda la fiesta, ya nos acabamos mi cajetilla de cigarros, he bebido mucho y creo que le voy a confesar mis sentimientos, sí, eso haré, le voy a decir cómo me siento y que me gustaría que volviéramos, pero primero, creo que debo armarme más de valor, seguiré tomando cerveza.
Estamos las tres en la mesa y me estoy divirtiendo mucho, creo que haré algo que no quería hacer...
-Me estoy divirtiendo mucho.
-Sí, todo está muy padre.
-Así sí me gustan las fiestas.
-¿A qué te refieres, Valeria?
-Pues, a que las fiestas con amigos son más divertidas, las fiestas familiares no me gustan, me aburro. Es más, de hoy en ocho se casa mi tío, ¿No quieren ir? Esta vez, se quedan en mi casa.
-Pues sí, estaría bien.
Ambas están de acuerdo, ups, no iba a invitar a nadie a la boda de mi tío, pero quiero que vayan.
Rayos creo que ahora quiero ir al baño, le diré a Marlem que me acompañe.
Ya estamos formadas para entrar al baño, hay mucha gente, de pronto, llega Grettel.
-¿Qué onda? ¿Cómo se la están pasando?
- Muy bien, todo está muy padre.
Nos quedamos platicando, cuando de pronto Grettel hace un comentario que me deja helada.
-Acá mis ojos que ya se va a casar.- Señala a Marlem y yo le pregunto.
-¿Es cierto?
Ella niega con la cabeza.
Creí que no era cierto, creí que no tenía novia, pero al parecer tiene a alguien, no puede ser, he tardado mucho.
Trato de convencerme de que no es cierto, estamos las dos solas en la mesa, creo que se lo diré ahora, solo esperaré a que termine lo que está haciendo, mmm ¿Le está tomando fotos a un vaso de agua?
-Mira.- Me dice al mismo tiempo que me enseña su celular.
-¿Qué?
-Mi novia, le digo que yo solo estoy tomando agua.
Leo el nombre, no me atrevo a decirlo, no puede ser es la misma persona de la que me había contado hace años, aquella novia que le puso el cuerno y a quien me dijo que amaba demasiado, no puede ser, regresó con ella, tiene a alguien, no puedo decirle nada, no lo haré, ya no lo haré.
Por un momento creí que ella se sentía igual que yo, por un momento creí que ella aún quería algo conmigo, pero era obvio, ella no me esperaría por tanto tiempo.
Marlem le llama a uno de sus amigos para que pase por nosotras y nos lleve a casa de Alejandra, sé que tiene novia, pero aún quiero que nos quedemos juntas.
Hace tiempo que llegó el amigo de Marlem, están bailando en la pista y Alejandra y Gabriel no están, Jorge y su hija se han ido, estoy sola en la mesa, me siento mal Marlem tiene novia, ¿por qué me tiene que pasar esto a mí? Bueno, no me importa, ya quiero irme de aquí, quiero estar a solas un momento, quiero perderme un rato, ¿Cómo podré hacerlo?
Aawww se metió un perrito a la fiesta, le daré un poco de comer. El perrito sale huyendo, ¡Rayos! Yo no quería hacerle nada, pero creo que he encontrado la forma de perderme, seguiré al perrito y le daré de comer, así podré salirme de aquí, pero esperaré a que Marlem se volteé para que no vea cuando me vaya.
Me voy siguiendo al perrito y al salir ya no lo veo, pobrecito, yo solo quería darle de comer.
-¡Valeria!
¡Rayos! Es Marlem, se dio cuenta muy rápido que me salí.
-¿Qué haces? ¿Por qué te saliste?
-Ah, es que se metió un perrito y cuando quise darle de comer se asustó y se salió corriendo y lo seguí, pero ya no lo veo.
-Vente, vamos a meternos.
-Sí, está bien.
Rayos, quería quedarme afuera por más tiempo, quería que tardaran más en encontrarme, pero bueno, ya que.
Listo es hora de irnos, me quiero quedar otro rato, pues quiero seguir tomando, no me siento bien, creí que Marlem me diría algo, aunque… la noche aún no termina, además nos vamos a quedar juntas.
Grettel me dice que ya es tarde y el niño necesita dormir y tiene razón.
Vamos en el coche del amigo de Marlem, ella va adelante con el, quería que se fuera a mi lado, pero bueno.
Suena el teléfono de Marlem y al parecer es su hermano, hablan por un momento, hasta que…
-Me acaba de marcar mi hermano, le dije que ya vamos para la casa de Alejandra, le dije que es en Ocotlán y dice que está cerca que ya mejor llegue a la casa.
Nooo, solo esto faltaba, ahora ya no se quedará con nosotras, ¡Demonios!
-Pero, ¿No dijiste que ya le habías pedido permiso a tu mamá?
-Pues sí, pero mi hermano también puede darme o no permiso.
-Aaah, está bien.
Ahora ni eso, solo nos quedan estos últimos momentos.
Llevamos una botella de tequila, así que vamos a una tienda a comprar un refresco para tomar en casa de Alejandra.
Llegamos a casa de Alejandra y el amigo de Marlem estaciona el coche y nos quedamos a tomar ahí, Marlem me sirve, pero creo que es mucho tequila, después de la primera ya me siento mareada no me había sentido así ni con la cerveza.
Me tomé solo dos cubas y ya me siento mal, creo que ya es momento de entrar. Alejandra sé baja del coche a abrir y yo me quedo abrazando a Gabriel, después se lo doy a Alejandra para que lo meta y me bajo del coche yo también y Marlem se baja a acompañarnos.
Nos despedimos, ella se sube al coche de su amigo y yo entro a la casa de Alejandra, el día se acabó y ninguna de las dos dijo algo, probablemente ella ya no siente nada por mí y yo no me atreví a confesarle mis sentimientos.
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Mi viejo gran nuevo amor
RomanceValeria es una chica que, desde que era niña, siempre supo lo que le gustaba y lo que no, ella no era de novios, sin embargo, fue hasta los 25 años que conoció a su primer gran amor. El reencontrarse con una noviecilla que tuvo en la preparatoria v...