UN NOVIO PARA EL PRINCIPE

-PRÓLOGO-

Con un porte de elegancia se encontraba un Azabache observando al chico que tímidamente venía platicando con el secretario de su Abuelo, sus ojos destellantes en un color bruno de igual su cabello algo rebelde de una altura 1,90 cm. cuerpo como un dios nórdico, hombros amplios tórax de granito un abdomen bien definido cintura estrecha piernas largas y bien trabajadas sus manos grandes y una mirada penetrante que hace que tengas un orgasmo con solo verlo.

Cuando el platinado llego hasta donde estaba ese Azabache, directamente le hablo al rubio que quedo frente a el, lo observo de una manera que, el contrario se sintió intimidado por ese personaje que se miraba imponente con solo su presencia.

El rubio era de piel canela, sus cabellos eran como tener el mismo sol frente a sus ojos, sus ojos como dos zafiros brillantes que se podía ver el reflejo del cielo transparente, que traían paz en el corazón, de 1.80 cm, de altura cuerpo definido el blazer que portaba le hacía ver esa curva de sus caderas y resaltaban esos glúteos respingones, su rostro era bello con unas tiernas marquitas que lo hacían ver tierno e inocente nariz respingada sus labios carnosos como una fresa a punto de ser mordidos.

Sasuke que embobado por esa belleza que ese rubio tenía, pero como era el Príncipe no diría nada, de ver de quien se trataba, su enojo aumento sus ojos se endurecieron, su quijada casi se traba, muy prepotente el Azabache hablo.

Naruto al ver de quien se trataba sus mejillas se pusieron de un color granate, ni en su vida pensó en volver a ver al Príncipe Sasuke, ni mucho menos trabajar para EL, se extremeció al escuchar su voz.

Sasuke tuvo que morderse la lengua para no gritarle a ese rubio, lo mentiroso y oportunista que era, que buen actor había sido en haberse acercado a el aquel día.

- ¡Escucha atentamente! - Le dijo el azabache al rubio que lo miraba impresionado por el momento. - Porque no lo repetiré dos veces. A partir de hoy eres mi prometido, fuiste comprado con dinero, defender el honor. La boda de los príncipes y princesas es una regla de nuestro País del Fuego, cometer una infidelidad del consorte imperial es una deshonra.

Un pensamiento se le vino directo a su mente del Blondo al ver que tenía en frente de él a...

"Este hombre es el Príncipe del País Konohagakure conocido como el País del Fuego, Él es UCHIHA SASUKE".

Sasuke lo saco de sus pensamientos al hablarle fuertemente.

- ¡SÍGUEME!

Naruto le vio incrédulo de lo que estaba oyendo, con una rapidez dijo:

- ¡AH! ¿PROMETIDO? Pero yo... yo solo he venido por el puesto de Mayordomo, ¿Como fue que llegue a esto? Por favor... escucha... Créeme.

Sasuke lo ignoro totalmente ya tenia con lo de su abuelo, la responsabilidad de que su padre Fugaku le cedería el mando de la Nación del Fuego ahora a este individuo con eso de que no estaba ahí por lo de ser el "PROMETIDO DEL PRÍNCIPE ".