¿Eres Tu?

Capítulo 30

Jungkook

-Jeon Jungkook- soltó una leve lagrima

-¿Si?- hable un como confundido no entendía

acaso mi nombre es algo extraño?

-eres tu, tanto tiempo esperando y al fin puedo tenerte de vuelta ya estas muy grande por dios sigues teniendo esos ojos tan lindos- Me abarso esas palabras eran hermosas pero yo seguía confundido no entendía todavía

Deseguro se confundio

-Disculpe, no entiendo creo que esta confundida- me separe del abrazo

Estoy confundido triste y apunto entrar en la lloracion

-Jungkook, soy yo tu abuelita Jeon- dijo llorando

esto no puede ser cierto, mi abuelita?

Aquella señora quien me amaba mucho y me consentia ¿ella?

-¿Abuelita?!- mientras decía esto una lagrima brotó en mi era enserio?!

Mi felicidad volvió a brotar

-la misma, Jungkook cuanto ya creíste tanto tiempo sin verte esto es un milagro- seguía sin creerlo- aquel día cuando me salvaste no te pude reconocer estaba anochesiendo y no puedo ver tanto así que no sabia que eras tu mi niño, además estaba despistada pero hoy como hay más luz pude reconoserte aunque sea de noche

Ah tenia razón su casa estaba muy alumbrada había mucha luz!!

-Me alegra volver a verte te extrañe tanto- lagrimas escurrían en mi rostro y entre las lágrimas una sonrisa brotó

Ella me esta devolviendo mi felicidad.

Me invito a pasar a su casa, era tan grande por dentro, deje mi maleta a un lado y hable

-Abuelita tu vives sola?- miraba por toda la casa era enorme

Sigo sin creerlo era la misma?
Mi abuela?

-Si hijo- miraba a un costado, había un mueble y ensima había muchos cuadros de fotos, uno de ellos era una familia de 3 integrantes, y si era mi mamá, mi papá y yo

Mi familia también solo me dieron amor falso.

-Abuela, y mis papas?- no quería mencionarlos pero aunque me hagan dejado me preocupaban

-No he sabido nada de ellos, los corri de la casa al saber que te dejaron en alguna parte de esta ciudad, pasé meses y años, buscándote, y hasta ahora pude encontrarte me llena de alegría

- ami igual abuelita- trate de sonreír pero algo me detenía

- mijo que tienes, cuéntame no te veo bien- me invito a sentarme en el sillón, me empezaba a sentir débil, volví a recordar a ese chico

-abuelita, yo- empeze a llorar ya no podía resistir más.

Pedozo por pedazo sentía mi corazón

Le había contado todo, desde el principio y hasta el final con muchos detalles

- hijo, tranquilo el no te supo valorar, eres una persona tan buena tu no te mereses eso y miralo del lado positivo si no te hubiera pasado esto no te huebira en contrado, ese chico no sabe de lo que se perdió- me habráso todas esas palabras me subieron animos ese habráso tan cálido me hizo sentir bien y sin querer derrame lágrimas en su ropa

-Gracias abuelita te amo, eres la mejor no has cambiado nada- me separe del habráso

Ella es la persona más honesta que conozco

-Yo igual te amo, tengo un cuarto allí arriba no es tan grande pero ahí puedes estar, hay un poco de ropa por si quieres mi niño

-Gracias abuelita, creo que iré al cuarto nesesito descansar- estaba algo feliz, eso era bueno

-Si mijo sube cualquier cosa estaré aquí--me dio un beso en el cachete y me fui era la mejor!

Entre ala abitacion pero deos! Era tan grande nose porque mi abuelita dijo que era chico, parecía que alguien había estado aquí, pero no le debo tomar importancia ahora nesesito descansar no me siento tan bien, y aprendí que al final de cuenta...

Para todas las cosas malas, siempre hay un pequeño buen momento