{Capitulo 02}

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La estúpida de Ximena se pasó con las fotos, estoy en mi casa acostada en el sofá como una morsa, mi celular no para de sonar con notificaciones de Facebook con mensajes de personas que no conozco insultándome, también me han llegado mensajes de hombres proponiéndome una aventura sexual, este maldito rumor se fue de las manos, unos chicos habían jurado que me había visto en una película porno yo solo los mande a que les dieran por el culo y que dejaran de masturbarse, la maldita de Ximena me las pagara y muy caro, quisiera agarrarla de sus extensiones y arrastrarla por todo el instituto, meter su cara al W.C. después de que alguien defeque, el sonido de mi celular me saca de los pensamientos asesinos que tenía hacia la plástica de Ximena, busco mi celular que se encuentra debajo de mi (como carajo no lo sentí), observe la pantalla del aparato y se trataba de una llamada, el numero era desconocido, juro que si es alguien pidiéndome sexo le diré hasta de lo que a va morir.

-aló-respondo de mal humor.

-pero que humor mi querida pantera-en ese instante sonreí.

-¡Oh Raymond!, Ese milagro que llamas, ¿Para qué sirvo?-pregunto con diversión.

-pues tenemos rato de no ver a nuestra querida pantera por aquí-dijo dramáticamente.

-ve al grano Raymond-le digo con burla, un bufido se escucha del otro lado de la línea.

-siempre impaciente pantera-reí ante su tono de reproche-hay una carrera y el jefe quiere que corras, te pagará un grande-dijo con resignación.

-¿Hora?-pregunto interesada, mil dólares no me vendrían mal.

-en dos horas, en el mismo lugar de siempre-respondió divertido.

-y ¿Si gano?-pregunto con un dejé de emisión.

-el doble-una sonrisa aparece en mis labios.

-te veo ahí-dije colgando.

Rápidamente subo a mi habitación, busco mi traje para las carreras, me di una ducha y al terminar me coloque el conjunto, bajo al garaje en busca de mi hermosa RSV4, me monto en el amor de mi vida y arranco luego de haber abierto la puerta del garaje con el control, salí a toda velocidad luego de asegurarme de que el garaje se cerrará, siento el viento golpear mi rostro bruscamente y me doy cuenta que no traigo mi casco, doy vuelta regresando a casa, aparco la moto y me adentro a la casa en busca de este, subí a mi habitación y lo encuentro, paso por el espejo de cuerpo entero que se encuentra ahí y me observó, el pantalón negro alicrado que bien se confundirla con cuero hace resaltar mi trasero, la chaqueta que si es de cuero oculta mis pechos, mi cabello color café y con las puntas teñidas en celeste llega hasta mi espalda baja amarrado en una coleta, me coloco el casco color negro y bajo. Cierro la puerta y me dirijo a mi moto y salgo a toda velocidad hacia la fábrica abandonada donde se hacen mayormente las carreras.

N/A

Espero que les valla gustando las historia tanto como a mí, espero que estén bien, besos con bacterias 😘. No olviden votar y comentar es de mucha ayuda para los escritores 😻

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