La fundación de ayuda Stark ayudó a todo Sokoviano que hubiese perdido su hogar durante la guerra con Ultrón, les dio un nuevo lugar donde vivir y dio empleo a todo aquel que lo necesitase, sobre todo, en la reconstrucción de la ciudad, que era mucha la ayuda que se necesitaba, por ello había organizado unos equipos de reconstrucción y limpieza de daños, donde todo aquel que quisiese ayudar recibiría un suelo de lo más generoso, y cuando la reconstrucción finalizase, pronto tendrían otros empleos. Sokovia no quedaría desamparada, suficientemente mal lo habían pasado sus habitantes.
Regresaron a Nueva York, pero Tony que había sido previsor, tiempo atrás había hecho construir un complejo especial para los Vengadores, uno que no se encontrase en medio de la ciudad de Nueva York, por si eran atacados de nuevo. Decidió vender la torre y todos sus habitantes se trasladaron al nuevo complejo, completamente equipado y perfecto que Tony había preparado para ellos.
Antes de volver a Nueva York pero, se despidieron de Clint, al cual dejaron en su granja, junto a su familia.
-Te voy a echar de menos, Clint- dijo Sarah abrazando con fuerza al arquero- pero mereces este descanso, más que nadie.
-Me has salvado la vida, Sarah- dijo este- te lo deberé toda la vida. Ven a visitarme cuando te sientas un poco perdida. Siempre estaré ahí para ayudarte en lo que sea.
-Eres un gran amigo- sonrió Sarah- y pronto serás un gran padre de nuevo. No te olvides de mostrarnos una foto del pequeño Barton- le pidió.
-Por supuesto- dijo el ojo de halcón- sus dos madrinas- dijo mirando a Natasha de quien ya se había despedido previamente y a Sarah- tienen todo el derecho del mundo a conocer a su ahijado.
-¿De veras?- preguntó Natasha sorprendida.
-No se llamará Natasha, por razones obvias, pero al menos contará con las dos mujeres más fuertes y poderosas que conozco de su lado.
-A ese niño, ni a nadie de tu familia les pasará nunca nada, no si podemos evitarlo, ¿Verdad, Sarah?- dijo Natasha.
-Por supuesto- dijo la austriaca- no olvides que ahora, tú- dijo mirando a Clint- y los vengadores, sois mi familia, y eso incluye al resto de los Barton.
-Portaos bien, chicas- se despidió Clint bajando del Jet
-Nos veremos, Clint- se despidieron ambas.
Ya en las instalaciones, no pasó mucho tiempo antes de que Thor también los dejase para volver a Asgard. Habían descubierto que el cetro de Loki era una gema del infinito, la gema de la mente, y el teseracto, y previamente el eter, que él mismo había conocido se trataban de otras dos piedras del infinito. Tenía que regresar al espacio y seguir investigando sobre ella. Serían claves para el futuro.
Tony también se marchó, dejando el complejo en manos de Steve. Él se dedicaría a vivir una temporada con Pepper en tranquilidad. Demasiadas cosas habían pasado últimamente.
Unos cuantos meses más tarde, en las instalaciones Avengers, Sarah y Natasha que ya se habían acomodado y vivían allí junto a Steve, Sam, Wanda, Visión, y Rhodes cuando no estaba ocupado con temas del ejército, recibieron un mensaje de Clint. El pequeño Nathaniel ya había nacido. Era un corto video donde el pequeño reía ante la cámara. Este portaba una camiseta con su nombre inscrito "Nathaniel Pietro Barton". Sarah fue a enseñarle el video también a la que se hacía llamar Bruja Escarlata, la cual sonrió, ante el homenaje que el arquero que tanto la había ayudado a encontrar un lugar en los Vengadores, le había hecho a su hermano fallecido. Sarah, a lo largo de los meses, había podido ver cómo a Wanda se le hacía duro seguir sin él. Habían estado juntos toda la vida, y ella no sabía cómo reconfortarla, no cuando ella estaba igual de mal por James, y no era su hermano o lo conocía de toda la vida, pero si que se encontraba en lo más profundo de su corazón.
Todos esos meses, Steve y Natasha habían estado preparando al nuevo grupo de vengadores para que aprendiesen a trabajar en equipo. Thor tardaría en regresar a la tierra, y tanto Clint como Tony se merecían unas buenas vacaciones, o jubilación, como bromeaba Tony con el arquero; pero a pesar de que los vengadores originales ya no estuviesen tan presentes en el equipo, eso no quería decir que las amenazas a la tierra hubiesen acabado, y necesitaban un nuevo equipo que estuviese listo para futuras ocasiones.
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UN TIEMPO MÁS TARDE. MAYO 2015
Había pasado un mes desde la llegada de Ultrón a la tierra y la creación de Visión. A pesar de todo, a Sarah, a veces, le parecía que todo eran vivencias de otra vida. Tanta paz no era normal en su mundo.
Estaban cerca del verano y pronto el calor arrasaría con Nueva York.
-Steve- dijo Sarah tras haber cruzado todas las instalaciones en busca del capitán, al cual finalmente encontró con Natasha en la sala de reuniones, preparando la próxima reunión- te estaba buscando.
-¿Ocurre algo?- preguntó Steve preocupado.
-No, no pasa nada... sólo quería hablar contigo de una cosa- dijo la morena.
-Claro, dime.
-Os dejaré a solas- dijo Natasha levantándose de su asiento.
-No hace falta, no es privado- dijo Sarah a la pelirroja- Es sólo que... ya se acerca el verano...
-¿Sí, y?- preguntó extrañada Natasha- no has venido aquí para hacernos el parte meteorológico, ¿cierto? Sabemos en qué estación vivimos.
-No me refiero a eso- sonrió Sarah- quiero decir que... pronto será 23 de Junio.
-Oh...- comprendió Steve de pronto- no me había dado cuenta de que estábamos tan próximos a esa fecha... no sé si tendremos un hueco para...
-No hace falta, Steve- rápidamente lo cortó Sarah- de hecho, me apetece estar un tiempo allí, en Hallstatt, visitar a Jack y a su familia... visitar a Lena... pero no sé si eso sería contraproducente para el equipo.
-Claro que no- dijo rápidamente Steve- eres importante aquí, muy importante, pero Hallstatt y Lena lo son para ti. Márchate y estate allí todo el tiempo que necesites. Aprenderemos a apañárnoslas sin ti.
-Si necesitamos tu ayuda con urgencia te avisaremos, pero no te preocupes. Si yo no me encontrara ya en casa, también querría volver a ella.
-Gracias chicos- dijo Sarah abrazando a ambos- Steve...
-Te mantendré informada de todo, no te preocupes- le dijo guiñándole un ojo- llévate un Jet, así podrás volver cuando quieras. No tengas prisas, tómate todo el tiempo que necesites.
-¿Cuándo te marchas?- preguntó Natasha.
-Posiblemente esta tarde- dijo la morena- cuando termine de empacar mis cosas, así cuando llegue a Austria será de día aún.
-Si necesitas ayuda de cualquier tipo, estaremos aquí- le dijo la pelirroja.
-Tranquila, no tengo tantas cosas- sonrió Sarah- os buscaré antes de marcharme.
-Estupendo, te acompañaremos al Jet- sonrió Steve. Sarah asintió y regresó a su habitación a recoger su ropa y algunas pertenencias que necesitaría con mayor urgencia. Fue rápido, como le había dicho a Natasha, no tenía tantas cosas. Sobre todo, guardaba muchas cosas de James cuando estuvo en la torre con ella. Sobre todo, su ropa, la cual se ponía cada noche para dormir.
A media tarde, se encontró con su bolsa ya preparada y a Natasha, Steve y el resto de los vengadores en el salón. Todos se despidieron de ella con una sonrisa deseándole lo mejor en su viaje, y Steve y Nat la acompañaron al Jet. En ese último tiempo, habían aprendido todos a pilotar una nave, así que no tendría problemas.
-Hasta la vuelta- dijo Steve despidiéndose de la chica.
-No arméis mucho jaleo sin mí por aquí- le sonrió Sarah- portaos bien, chicos.
-Vigila tú también, Karmichael- se despidió Nat antes de que Sarah cerrase las puertas del Jet y se enlairase rumbo a Austria.
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We're Just the Same - Bucky Barnes & OC
RomanceÉl había perdido sus recuerdos. Ella había perdido su alma. Él era un soldado de invierno. Ella un soldado explosivo. Nadie quería acercarse a él. Ella no quería que nadie se le acercase. Dos personas con un pasado tormentoso, con culpa y con...