Capítulo II:Su nombre es "Eli"

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Habían pasado tan solo días desde que se confirmó que tengo una hija, así que se me entrego la custodia de la pequeña ya que no tenían algún otro familiar que pudiese hacerse cargo de ella,no voy a negarlo odiaba la idea de tan solo tener un niño cerca,mi vida de "Rockstar" estaba arruinada.

Estába limpiando mi departamento estaba hecho un asco y si iba a vivir una niña aquí tenía que ordenar un poco , comenzé por mi habitación, cuando limpiaba mi buró,depronto cayó algo parecido a un papel que hacía de separador en un vieja novela romántica,al levantarlo me di cuenta que era una vieja foto, una foto de mi madre y yo, ella murió cuando tenía 18,yo cómo todo hijo amaba a mi madre y cómo todo hijo su partida dejo una grave herida en mi alma,mi madre no era buena...era la mejor,cuando mi padre nos abandonó mamá siempre cuido de mi, a pesar de tener 2 trabajós.cada vez que yo veía a mamá cansada la abrazaba,le daba un masaje y le preparaba algo de comer.
Mi vida se desmoróno cuando llegué del colegio y había una ambulancia afuera del edificio en el que vivíamos,transportaban un una persona que al parecer estaba sufriendo un paro de respiratorio al darme cuenta no dude ni un segundo y estuve con mi madre hasta llegar al hospital, después de atenderla la establecieron en una habitación,al parecer todo estaba aparentemente bien,cuide de ella los días que estubo en el hospital, mamá seguía utilizando una máscara de oxígeno para respirar,yo intentaba apoyar a mamá, animarla para que mejorará,cuando dieron de alta a mamá regresamos a casa, mientras ella descansaba yo trabajaba en una gasolinera, llegaba tarde en las noches y directamente me iba a dormir mamá siempre se quedaba dormida en el sillón de la sala por esperarme, aveces la despertaba y adormilada la llevaba a su habitación para registrarla en su cama y así siguiera durmiendo,eran así casi todas las noches, hasta que llegue tarde en la madrugada la televisión estaba encendida y mamá parecía estar dormida sentada en el sofá,estaba muy cansado ,la cubrí con una manta y me fui directo a la cama,al despertarme la televisión seguía encendida y mamá seguía ahí, pensé que seguía dormida pero después,la llamé para desayunar pero ella seguía en el sofá me acerque angustiado a ella y tome su muñeca estaba helada, mamá ya no respiraba,su corazón dejo de latir,Lloré desconsoladamente mientras me aferraba al cuerpo de mi madre.

Por un momento pensé en ello en la enorme soledad en la que me sumergí cuándo la única mujer que amaba se fue,la agonía y dolor que causó aquella pérdida, enseguida paso por mi mente mi hija,si como lo oyen mi hija, alguien que siendo tan pequeña su madre murió,ella sólo me tiene a mi,y yo solo la tengo a ella, así que despues de pensarlo por mucho tiempo varios días pasó un extraño "milagro",quería ser un buen padre cómo mi madre,estaba completamente decidido en que quería hacerlo, deje mi trabajo de mercenario y conseguí un trabajo de Mecanico y espere hasta que por fin pudiera conocerla,nunca había estado tan ancioso y aterrado, quería que el día llegará.

Después de una larga espera el día había llegado, fue un domingo tenía el día libre,la trabajadora social dijo que vendría hasta mi departamento con ella, estaba tan emocionado como si mi Idol viniera por un Fanservice,me asegure de que todo estuviera en orden cuando de repente tocaron la puerta mi corazón se agitó y solté un grito de Fangirl .

- ¡son ellas!- dije emocionado-Tranquilo Louie no mueras ahora.

Caminé tratando de ser serio y verme cool, cuando abrí la puerta tal fue mi sorpresa ¡no eran ellas!,era mi vecina una mujer de tercera edad, Doña Concepción de la Cruz Martínez viuda de Corsega y Jiménez pero como es muy largo todos los del edificio le llamamos "Doña conchita".

-Hijo me puedes regalar poquita azucar en esta taza-dijo Doña conchita mientras me mostraba su gran tarro de cerveza.

-Si doña conchita,pase -supire decepcionado encerio pensé que eran ellas.

Prosegui a caminar a la cocina y saqué el recipiente dónde suelo colocar el azúcar, comenzé a vertirla en el gran tarro de Doña conchita la cual cada vez me pedía más azucar, después de llenar el tarro me agradeció y se fue sin mas que decir.

Me eche en el sofá, cuando de nuevo tocaron a la puerta,me levanté enseguida y seguí intentando con mi semblante serio para verme cool cuando abrí la puerta estaba la trabajadora social pero no veía a mi hija.

-Buenas Tardes señor Benedetti-dijo la trabajadora social sin expresión alguna .

-Buenas tardes ,por favor pase-dije mientras me hacía a un lado para que pasará y pude notar a una pequeña personita atrás de ella.

-Gracias,vamos Eli hay que entrar- se hizo aún lado la trabajadora social y por primera vez pude mirarla,ella era Woow.. Hermosa no quería presumir pero ¿Qué se podía esperar de algo salido de una obra de arte como yo?,ella parecía una muñequita tenía el cabello negro y los ojos color ámbar y tenía una delicada piel blanca como la porcelana,era bastante hermosa su nombre era Elizabeth. Esa fue nuestra primera tarde juntos, fue maravillosa comimos, reímos y jugué con ella hasta que se quedó dormida,desde ese día mi camino que había sido por mucho tiempo un sendero lleno de oscuridad por fin tenia un poco de luz.

¡¡¡Renací en una P*** Princesa!!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora