Capítulo 1

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"¡Mierda!" Dije en voz alta, pero no lo suficiente para que alguien me oyera. Miré el teléfono y vi que eran las 4:27 am.

Cuando era niña y despertaba, a una hora más racionable, solía pensar en cómo iba a ser mi día y las cosas que podía hacer, planificaba mi día. Pero las cosas yo no eran así. Ahora sólo hacía lo que se me ocurriera en el momento, hacía cosas espontaneas.

Las cosas cambian. Las personas también... cambian bruscamente. Como cuando estás caminando por la calle y luego paras porque el semáforo cambió a rojo, prestas atención a tu celular puesto que te ha llegado un nuevo mensaje de texto, pero luego vuelves la mirada a el frente, ya ha cambiado otra vez. No esperas más para llegar hacia tu destino, en este caso cruzar a el otro lado de la vereda. Das unos cuantos pasos. Escuchas un ruido acompañado de personas gritando... gritándote con desesperación, pero no sabes por qué. Giras la cabeza y ves una luz, una figura que viene hacia ti a alta velocidad, no te puedes mover, el pánico te ha ganado. Un dolor inimaginable se apodera de cada fibra de tu cuerpo, ahora tienes una verdadera razón para no moverte; personas acercándose a ti. Te sientes cansada. Parpadeas una, dos hasta tres veces y luego... se cierran. nada. No vez nada más que una oscuridad que se hace eterna y la única cosa que te preguntas es ¿Qué paso?.

Me quedé pensando por horas hasta que llegó la hora de arreglarme para ir a la escuela. Cuando termine de vestirme tomé mi bolso y salí en dirección a esta. Iba tarde, como de costumbre. A pesar de esto, decidí caminar hacia la escuela, decir verdad no me importaba demasiado la puntualidad, me gustaba el hecho de pensar en las mañanas y de tomar un poco de aire fresco.

Tuve que pasar por dirección, debido al atraso. Siempre me daban el mismo sermón de la puntualidad, los problemas de actitud, como adaptarse a la sociedad, las calificaciones. Siempre esa misma mierda, todos los jodidos días. Al terminar fui al baño, para pensar en alguna bobada, luego me dirigí hacia el salón. Allí estaba Ian, el maestro de Ingles, quien era el típico maestro veinteañero por el que todas las chicas deseaban acostarse... ¡Oh! Espera. Yo no soy como las demás.

Era un puto día como cualquier otro. Las típicas clases. Las típicas conversaciones con mis amigas. Las mismas notas en los exámenes. Mismos pensamientos. Mismos problemas. Las cosas van como siempre, en otras palabras, 'Un día como cualquier otro. No sé porque debería de ser diferente a los demás.

Acababan de terminar las clases, era viernes, por ello al día siguiente no tenía que volver. Como era de costumbre, después de clases me dirigía al parque y prendía uno.. dos.. hasta tres porros, a decir verdad todo dependía del día que tuviera. Cuando me drogaba podía tener otra ideología. Era fascinante. Era mi típica rutina.

Nos encontrábamos a mediados de enero, por lo tanto era un día frío de Invierno. Había comenzado a llover, no llevaba paraguas, por ello mis leggins negros, mi camiseta negra de Ozzy Osbourne, mi camisa a cuadros roja con negro, mis botines negros y mi abrigo de cuero, obviamente del mismo color... negro y mi bolso terminaron empapados. Mi maquillaje, compuesto por una mascara de pestañas, delineador, base, corrector, demasiado corrector, debido a mis incontables ojeras producidas por el insomnio, todo eso terminó estropeado.

Luego, cuando llegué a casa, después de una larga caminata de la escuela a esta, me di cuenta que mi padre no estaba, probablemente habría salido a una de sus típicas reuniones de trabajo, y mi madre aún se encontraba en su oficina, no llegaba a casa hasta las 4:15 pm y recién eran las 2:45 pm. Pero en casa ya se encontraban mis hermanos, Caroline y Josh, de catorce y nueve años, respectivamente. Al llegar se encontraban almorzando debido a que los viernes no almorzábamos en la escuela. Josh se encontraba sentado mirando hacia la pared, dándome la espalda, al igual que Jill, nuestra empleada, en cambio Caroline estaba sentada con la vista en dirección hacia donde mi. Al verme frunció el ceño y me preguntó.

I'm addicted to the madness (L.J.) [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora