Vegeta y Bulma

Tentación

POV VEGETA:

Desde aquel día en que la sabandija se había ido de la vida de esa mujer no le he vuelto a ver, mejor, ni me agradaba y realmente, nadie lo hacía, la que más me molestaba era esa mujer de pelo azulado, era una gritona y siempre iba por ahí sin dejar nada al pensamiento, no me gustaba que se fuera exhibiendo por ahí como una prostituta, y ella no lo era.
Aún así, había algo que hacía que no parase de pensar en ella, y lo odiaba, quería olvidarme del tema, lo que paso en namek fue puro placer y nada lo iba a cambiar, querer es debilidad, y yo iba a tener ni una.

POV BULMA:

Había pasado más de un mes desde que Yamcha se fue de mi vida, me llamaba diariamente para pedirme perdón y una segunda oportunidad, yo siempre le contestaba que era mejor que fuéramos como amigos, y él lo aceptaba apenado.

No voy a negar que me siento un poco sola, Yamcha estaba la mayoría del tiempo conmigo, ahora que no está, obviamente soy una mujer fuerte y puedo estar yo solita, pero aún así, mato el tiempo trabajando para olvidar.

Ahora tenía más tiempo para pensar en él y nuestro encuentro en namek, no podía creer que después de todo lo que vivimos no sintiese nada por mi, una mujer tan bonita como yo.... pero bueno, que me esperaba, era de la misma raza que Goku.
Aún así, no podía negar que yo no sintiese algo por el, ese saiyan me llamaba la atención, tan reservado y orgulloso,eso me hizo pensar que tenía un objetivo, quitarle ese orgullo, por las buenas... o por las malas...

POV NORMAL:

Al día siguiente, como todos los días, Vegeta se levantaba a desayunar y seguir con su entrenamiento, habituado a que la señora Briefs le preparase el desayuno, esa mañana se llevo una sorpresa.

Al llegar a la cocina la vio preparando su desayuno ; unos pancakes con nata y fresas, un café cortado y un zumo de naranja recién exprimido, pero eso no fue lo que le dejó boquiabierto, si no que ella llevaba el pelo rizado y despeinado, con una camiseta corta que no dejaba nada a la imaginación y unos shorts. Estaba realmente preciosa, aunque el intentase no darle importancia, no podía evitar sonrojarse al verla.

Nunca le había pasado eso con una mujer, por muy bonitas que fueran, no tenían ningún efecto en el, pero ella le causó una elección difícil de disimular, así que, un Vegeta enfadado por la reacción que ella causaba en el, se sentó a la mesa y empezó a devorar su plato .

-Se que no esperabas que te preparase yo el desayuno, pero a partir de hoy tendrás que acostumbrarte a ver a una chica tan bonita como yo por las mañanas. - Le dijo Bulma girándole un ojo mientras se sentaba a la mesa a desayunar con el.

-Tch... - Contestó el saiyan casi acabando su plato.

Bulma al acabar de desayunar y recoger los platos, se acercó a Vegeta y le susurró al oído:

- Tenemos un tema del que hablar, vamos Vegeta, no podemos dejarlo así...

-No hay nada de lo que hablar, me diste placer y eso debería ser un orgullo para ti, haber estado con el principe de los Saiyan... y créeme, no lo volvería a hacer, no con un ser tan débil como tú . - Dijo Vegeta ya levantado y agarrándola por la muñeca.

- Ya veo... todos iguales... - Dijo Bulma con una voz decaída soltándose de su agarre con agresividad.

Al ver su reacción, Vegeta se dio cuenta de que se había pasado, pero no le dio importancia y se fue a entrenar.

POV VEGETA:

Nunca admitiré que mentí, si, me dio placer, como otras antes en mí planeta, pero había sido diferente, había sentido algo en ese encuentro.

Verla enfadada conmigo era peor a que me mataran 5 veces seguidas, pero no iba a hacer nada, no podía caer tan bajo como para que ella se convirtiese en una debilidad, mi debilidad, por que no iba a dejar que fuese de nadie más.

POV BULMA:

Eran las 23:02, el cielo estaba estrellado y había una brisa suave acariciando mi piel, no podía pensar en lo que él me había dicho esta mañana, ser débil, solo placer....

No era que me sorprendiese, de todas las posibilidades era la más probable, pero sí que me decepcionó un poco... en fin, solo tenía que olvidar lo que paso entre nosotros dos y verlo como a uno más, una chica tan guapa e inteligente como yo no se encuentra en cualquier sitio...

Me fui a mi habitación ya que empezaba a tener sueño, había sido un día de trabajo duro en el laboratorio. Me puse el pijama y fui a cerrar el balcón, pero el cielo esa noche estaba precioso y no podía evitar quedarme embocada al verlo, cuando por fin lo cerré y entré de nuevo, allí estaba el, apoyado en mi pared.

- Mentí. - Dijo serio.

- Que? - Le conteste confusa.

- No eres un ser débil. - Me miro a los ojos, los suyos eran negros, un negro en el cual podía sumergirme solo con verlo.

- Solo placer? - Pregunte yo decidida. Al no oír respuesta repetí la pregunta. - Solo sentiste placer, nada más?

- Tch...

Me acerqué a él para poder verle de cerca cuando respondiese a mi pregunta.

- Y bie... - No me dio tiempo a terminar la frase.

- No, no solo sentí placer, no se lo que sentí por que nunca me había pasado antes, pero no tiene importancia, no puedo tener debilidades.

- No seré tu debilidad.

- Si, lo serás.

- No, seré tu motivación.

Al terminar la frase me acerqué y le di un beso, corto y dulce, me separé y le dije:

- No te vayas.

- Dormiré contigo mujer, solo por hoy.

Me metí en la cama y él también lo hizo, me apoye en su pecho y se quedó dormido antes que yo, cuando me giré para poder descansar, su cuerpo me siguió y me abrazó, no me soltó en toda aquella noche, nuestra primera noche juntos.