Capitulo 3

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Le pregunté a Daniel por su facebook y al instante empezamos a chatear, ese sábado empezó a escribirme haciendo puntuación a lo bonita que era y a que si fuera su novia el me trataría diferente a Miguel, pero me empezó a poner incómoda. No sabía lo que sentía, por un lado me gustaba lo que me decía, pero por el otro, era una falta de respeto para Miguel, por lo que le pedí que mejor nos conociéramos más y simplemente fueramos amigos.

Al día siguiente empecé a chatear con el, cuando en eso empezó a decirme que yo lo exitaba, que cada vez que me veía no podía evitar como me vería debajo de su cuerpo, por lo que decidí inventar que era viegen para evitar llegar a tener relaciones con él y así espantarlo, cual fue mi sorpresa que contrario a lo que yo pensé, eso le exitó y se empeñó más y más en mi cada vez. Dijo que me penetraría en forma de círculos para abrirme y que me chuparía toda. Que se moría por tener mis tetas en su cara y meterme su pene en mi boca. En ese momento leía 50 sombras de Grey y el estaba volviendo que ese libro me hiciera pensar en cosas que no debía, con cada cosa que contaba Anastasia sobre Cristhian más crecía el deseo que sentía hacia Daniel, pero debía detenerme yo tenía novio.

Horas más tarde Miguel pasó por mí, fuimos a cenar y luego entramos al bar donde yo no quería que Daniel me atendiera, estaba yo vestida con una blusa de seda azul con una franja naranja, minifalda azul y zapatos de plataforma blancos, mi cabello perfectamente planchado y mi cara maquillada. En unos minutos Daniel se me acercó y me indicó lo linda que me veía lo que hizo fue sonrojarme. Pase una linda velada con Miguel hasta que llegó el momento de retirarnos, Miguel se dirigió al baño y Daniel se me acercó y me preguntó:

-Yo tengo libre los martes, quieres ir a tomarte algo conmigo?-preguntó Daniel, a lo que pensé, jamás saldría con este individuo y contesté

-Sí, esta bien ahí nos hablamos.- porqué le dije que sí? Esto no esta bien

-perfecto, por cierto hoy no me saludaste- a lo que señaló su cachete, entinces dirigí mis labios hacia su cachete y lo que hizo fue robarme un beso, justo ahí en su lugar de trabajo, donde cualquiera pudo vernos, el me deseaba por amor de Dios, Daniel me deseaba.

Salí anonadada por lo ocurrido y llegue a mi casa a pensar en que no podía dejar que algo más pasara, el había sido muy atrevido en besarme de esa forma, teniendo yo novio, ahora que le diria a Miguel, en estos 4 años y medio jamás había pasado algo parecido. En eso recibo un mensaje del facebook que decía "que rico beso". Quedé aún más anonadada.

Nada es lo que pareceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora