Escritos de un corazón terco.

En El Tren

Hoy voy en el tren mirando sin rumbo fijo, viendo pasar casas pero no logro poder apreciar el paisaje.

Voy pensando en todo lo que está ocurriendo con mi vida, aún llena de preguntas y sin percibir claramente lo que cambió cuando estuvimos juntos.

Aún estoy indecisa, a pesar de que tu recuerdo sigue muy presente en mis días por fin logre que me deje de lastimar, pero no entiendo por qué aún no se va.. Por qué aún sigue en mi.

Estoy segura y no tengo duda que te quiero, ¡demonios!.. Te quiero demasiado, y a pesar de que estoy mejor sin ti, incluso como ya dije antes no me dueles, sigues presente cada noche antes de dormir, cada día durante la comida y en las mañana al despertar..

Tengo que confesar que muchas veces al día te pienso, te extraño y me pregunto por ti.. Si soy sincera varias veces pienso en buscarte, pero últimamente ya no tengo esa intención.

También me siento más tranquila, me di cuenta que me sentía demasiada presionada contigo. Hay un poco de calma, antes tú eras quien me tranquilizaba y ahora lo sigue siendo por lo menos en esta etapa.

Hoy veo por la ventana un paisaje gris, que sin tener nada que ver contigo me hizo recordarte como casi todo lo que me rodea, por qué no necesito un pretexto, simplemente llegas a mi mente sin razón.

La incertidumbre de preguntarme si tú me extrañaras o pensaras en mí, si me lograste superar tan fácil, tan rápido como veo pasar las cosas por esta ventana.  

Si dejaste de quererme de un día para otro o simplemente nunca me quisiste. Si al cerrar los ojos te olvidaste de mí y realmente solo quede atrás.   Pensar en buscarte pero verlo innecesario por qué te ves tan bien sin mí, por qué si sintieras un poco de lo que siento ya me hubieras llamado, o simplemente para ver si me pudieras dar respuestas. 

Al fin llegue a mi destino, sigo llena de preguntas, pero quizá nunca nadie las pueda resolver, solo me queda seguir caminando y esperar para abordar el tren de regreso a casa, esperando que te pueda dejar en el pasado.